Con la emoción a flor de piel. Con su familia y todos sus amigos presentes. Con aquellos que lo acompañaron en el arranque y con los que estuvieron a su lado en este último tiempo. Con el público ovacionándolo a cada rato. Con la satisfacción de haberlo dado todo y la tristeza de un momento que hubiera querido no llegase nunca. Así, Lucas Bernardi se despidió.
Después de un par de videos, ingresaron a la cancha invitados de lujo. Gerardo Martino, ídolo de Bernardi y actual DT de la selección argentina, fue uno de los primeros en salir al campo y abrazarlo. También estuvieron Roberto Sensini, Gabriel Heinze, Rolando Schiavi, Sebastián Domínguez, Germán Ré, Sebastián Peratta, Agustín Alayes, Mauro Rosales, Sebastián Cejas, Mauricio Sperduti y muchos otros. En una pantalla se proyectaron algunos saludos internacionales como los de Fernando Morientes (compañero en Mónaco), Mauro Formica y Nahuel Guzmán.
Y al final llegaron las palabras de Bernardi: “Pensé que este momento no iba a llegar nunca. Me han tocado vivir seis años muy difíciles, pasaron cosas buenas y malas. Logramos el objetivo más lindo. Este no es un final porque el destino nos volverá a encontrar”.
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