Emiliano Vecchio debutó con apenas 16 años en Central. Algunas decisiones, propias de la edad y de su entorno en ese momento, hicieron que emigre muy pronto de Arroyito. Pero hoy el volante ofensivo está de vuelta. Kily González dio el visto bueno y el jugador se sumó al plantel canalla. Ayer fue el elegido para charlar con la prensa y sin dudarlo declaró que se siente feliz porque volvió al club de sus amores.
“Hoy soy feliz porque volví al club de mis amores, del que soy hincha”, dijo ayer Vecchio.
El rosarino, de 31 años, quien ofreció una videoconferencia organizada por el Departamento de Prensa del club de Arroyito, reveló que “desde hace un tiempo venía buscando esta posibilidad, hacía un buen tiempo que (el entrenador) Cristian (González) creía que yo podía encajar en su proyecto y se dio naturalmente”.
“Hace un mes y medio o dos que voy a trabajar a Rosario todos los días con un profesor. Si hubiera venido de Arabia en la mitad del torneo a lo mejor me costaba adaptarme, pero como con todo esto que pasó arrancamos todos de cero, físicamente estoy a la par de mis compañeros”, añadió el mediocampista.
Consultado sobre si ante la ausencia de un volante izquierdo en el equipo, él podría jugar en ese lugar, Vecchio confió que “me adapto a la función en la que el Kily me ponga, lo más importante es estar al 100 por ciento físicamente, pero las posiciones no son relevantes. Si Cristian siente que tengo que jugar por una banda voy a dar todo”.
Bajo ese cotexto, el volante que viene de jugar en Bolívar advirtió que “mi posición es enganche, pero también puedo jugar de volante mixto, de 5 o de mediapunta, pero quiero jugar en Central y no me interesa mucho la posición. Lo que más quiero es que Central pueda estar en los primeros planos y pelear campeonatos”.
La pregunta sobre su primer paso por el club y su abrupta salida estaba al caer. Y en su respuesta, Vecchio reconoció que “era muy joven y reconozco que no estuve acompañado por la mejor gente para que me asesore, por eso cometí errores y me equivoqué al irme tan chico de Central”.
En esta línea, el Gordo Vecchio reconoció que “a los 14 años perdí a mi padre, que era la columna de mi casa, y estoy muy agradecido a Central, donde estuve diez años, desde los seis o siete años, y al (coordinador de inferior José) Coco Pascuttini, que me sacaron de la villa y de la calle y me enseñaron valores para manejarme en la vida. Por eso ahora vuelvo porque quiero devolverle a Central algo de lo que me dio”.
Antes de esta vuelta al club que lo vio nacer, Vecchio pasó por doce clubes: Fuenlabrada, Rayo Majadohonda (ambos de España) Corinthians, Gremio Barureri (Brasil), Defensores de Belgrano de Villa Ramallo, Unión Española, Colo Colo, Qatar Sports Club, Santos, Al-Ahili, Al Ittihad y Bolívar.
Por último, Vecchio confesó que este segundo ciclo en el Canalla “es el desafío más grande de mi vida”. Y añadió que su idea “es intentar inculcarle a los más chicos lo que uno aprendió y que entiendan que jugar en Central significa estar en un lugar privilegiado”.
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