Leandro Rosati
Sin dudas el sector turístico es uno de los más afectados por la pandemia del coronavirus. Durante 2020 sufrieron el cierre casi total de la actividad, pero en 2021 hubo pequeños repuntes durante el verano y Semana Santa. La gran apuesta del sector es que la temporada veraniega sea el puntapié inicial para la recuperación. Al menos de lo que queda en pie, porque, calculan, una de cada cinco agencias de viaje tuvo que bajar las persianas durante la pandemia.
Claudio Manibesa, presidente de la Asociación Rosarina de Agencias de Viajes (Arav), estimó ante la consulta de El Ciudadano que “el 20% de las agencias de Rosario cerraron sus puertas”. Otras, tuvieron que reconvertirse. “Muchas trasladaron sus oficinas, porque el gobierno permitió que sigan trabajando home office. El cierre definitivo se produce cuando se da de baja el legajo, ese dato preciso impacta en Buenos Aires (Ministerio de Turismo)”, describió Manibesa.
En Rosario había antes de que llegara el virus 250 agencias de viajes, y entre 700 y 750 en toda Santa Fe. En ´terminos laborales, eso se traducía en alrededor de 5.600 fuentes de trabajo.
La esperanza es que el verano 2022 descongele
Con respecto a la temporada de invierno, los viajes locales son los elegidos por los rosarinos. “Si lo comparamos con el año pasado, tuvimos una leve mejoría, pero con respecto a la temporada 2019, cuando no había pandemia, las ventas se desplomaron entre un 60 y 70 por ciento”, confirmó el presidente de Arav. Y agregó: “Los destinos más elegidos durante estas vacaciones son la Patagonia y la nieve”.
La crisis sanitaria provocada por el coronavirus y la incertidumbre cambiaria son algunos de los motivos que paralizaron los viajes al exterior. “Hubo un pico cuando muchos se fueron a vacunar al extranjero y aprovecharon para disfrutar unos días, pero eso casi ni movió las agujas del mercado”, contextualizó el referente empresario.
El horizonte es hoy incierto. Rigen las restricciones de cupos de pasajeros para ingresar al país y el tipo de cambio fluctúa día a día, entre otros puntos que complican las operaciones. “Hay mucha incertidumbre, la situación sanitaria no está clara en varios países y eso le hace ruido al pasajero”, graficó Manibesa.
Para el año que viene, la expectativa está puesta en el regreso del programa Previaje. “El empresario del sector apuesta al turismo dentro del país y esperamos que el verano sea puntapié inicial para la recuperación definitiva”, se esperanzó el titular de Arav.
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