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Picadura sorprendente

El veneno de una temida araña puede ser usado como el Viagra

Investigadores lograron sintetizar el componente de la especie phoneutria nigriventer, nativa de Sudamérica, que provoca una larga y dolorosa erección, quitándole los efectos adversos


La araña del banano (phoneutria nigriventer) una especie típica de Brasil, Uruguay y el norte de Argentina que acostumbró a refugiarse en los racimos de fruta de la especie implantada en América y está emparentada con otra araña considerada por alguno biólogos como la más venenosa del mundo, puede tener un efecto mayor que el Viagra.

La araña del banano se caracteriza por ser de tamaño y aspecto imponente –comparable a la mano abierta de un adulto– y tener comportamiento agresivo. Es errante y tiene dos ojos grandes frontales y dos menores a cada lado, dos largos quelíceros de color rojo amarronado y patas gruesas y peludas. El aspecto acompaña el nombre del género –phoneutria– que significa “asesina” en griego.

Se trata de una araña bastante temida, aunque otros expertos sostienen que no es tan peligrosa. Sí provoca muchos accidentes al año, ya que suele vivir en zonas pobladas por humanos, especialmente en plantaciones de banana, donde a menudo pica a los trabajadores. Sin embargo, la mayoría de estas picaduras suelen responder bien al antídoto, sin dejar efectos secundarios. Incluso sostienen que en muchos casos de picaduras ni siquiera se ha administrado el contraveneno y los pacientes no sufrieron mayores complicaciones.

Sin embargo hay casos en que la picadura ha resultado fatal, sobre todo en niños.

Entre los síntomas provocados por el veneno se encuentran problemas respiratorios que en ciertas ocasiones pueden terminar en asfixia, sudoración, taquicardia y parálisis. Y además algo muy peculiar: una dolorosa erección de varias horas, que puede incluso llegar a provocar impotencia.

Este último síntoma llamó la atención de investigadores de farmacia y bioquímica que vieron un potencial beneficio: que una erección podría ser una bendición para los que padecen disfunción eréctil. Por eso, desde principios de la década de los 2000 se ha investigado cómo podría producirse un fármaco basado en este veneno, explotando la capacidad de estimular la excitación sexual, pero sin efectos secundarios.

Finalmente, un estudio recientemente publicado en Journal of Sexual Medicine describe el funcionamiento de este fármaco, que ha dado lugar a muy buenos resultados en ratones, sin generar efectos secundarios.

Como con toda lógica dejar que la araña pique a los pacientes antes del acto sexual es un imposible, especialmente por el resto de efectos generados, los autores de este estudio han sintetizado en el laboratorio el componente del veneno responsable de la erección, un péptido llamado pNPP-19.

Con anterioridad ya habían demostrado que este fármaco sintético daba lugar a buenos resultados en ratas con disfunción eréctil a causa de lesiones en los nervios cavernosos, ya que se inducía la relajación del tejido esponjoso del pene y el clítoris, mejorando el flujo sanguíneo en ellos y facilitando la erección.

Faltaba saber si era seguro utilizar el tratamiento en pacientes de riesgo, por lo que en este último estudio han repetido el procedimiento en modelos experimentales de rata y ratón, afectados por diabetes o hipertensión. Y los resultados fueron un éxito, pues el medicamento pudo administrarse de forma eficaz y segura, tanto inyectándolo como por vía cutánea, a través de una crema. Sin embargo, en esta última opción sólo el 10% de la cantidad aplicada penetraba en la piel por lo que había que aumentar la dosis. Pero también funcionaba.

Además, en un segundo experimento probaron a administrar pNPP-19 junto a sildenafilo (Viagra), comprobando que conseguía potenciar notablemente los efectos de aquella droga.

Aunque los investigadores dicen que es todavía muy pronto para asegurar nada, no dejan de lado la posibilidad de que el futuro de los tratamientos para la disfunción eréctil esté detrás de esta gran araña venenosa nativa de Sudamérica.

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