Una semana después del temporal que azotó Rosario, nuevamente la ciudad amaneció con una fuerte tormenta que en pocas horas trajo consecuencias considerables en distintos barrios de la ciudad. También acarreó un nuevo derrumbe: en la Escuela de Enseñanza Media Nº 431 General Don José de San Martín” (ex Colegio Nacional Nº 2), ubicada en Entre Ríos y Weelwright, un muro del patio se derrumbó. Afortunadamente no hubo heridos. Los docentes ya venían realizando reclamos –desde hace más de dos años– por las malas condiciones edilicias.
Desde muy temprano caminar por las calles de la ciudad se hizo complejo a causa de los 118,5 milímetros de agua que cayeron y provocaron caos vehicular y anegamientos. A eso se le sumaron los numerosos cortes de luz.
Desde el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) indicaron que la lluvia comenzó a las 0.45 de ayer y duró hasta las 2.47; en ese período se registraron 15 milímetros de agua. Luego, desde las 5.21 y hasta las 12.20, se contabilizaron otros 84 milímetros, y hasta las 15 cayeron 19, 5 milímetros, sumando un total de 118, 5 milímetros. Las ráfagas de viento más fuertes se midieron a las 8.17 de ayer, de 67 kilómetros por hora, en la zona sudoeste de la ciudad.
El subdirector de Defensa Civil, Gonzalo Ratner, afirmó a El Ciudadano que el temporal dejó 40 árboles caídos y lo más grave se registró entre las 8 y las 9 de ayer, cuando el agua caída aumentó considerablemente.
“Los anegamientos por obstrucción de bocas de tormenta fueron en distintas arterias de la ciudad, pero las zonas más afectadas fueron Pichincha, avenida Pellegrini, zona centro, norte y noroeste. También estamos trabajando en los barrios de la zona noroeste, Stella Maris, en el asentamiento La Bombacha, Empalme Graneros, en la zona sur de El Mangrullo, Santa Lucía y Nuevo Alberdi”, detalló Ratner.
Además, indicó que en la ciudad “no hay evacuados, aunque hubo que lamentar el ingreso de agua en algunos domicilios durante algún lapso corto, sobre todo en la zona noroeste, pero no hubo necesidad de evacuar, aunque sí algunas familias se autoevacuaron hasta que descendió el agua y luego retornaron a sus hogares”.
El municipio continuará con las tareas durante el fin de semana, principalmente en los barrios más afectados, para dar respuesta a los vecinos y poder normalizar la situación.
En tanto, Diana Antruejo, vocera de la Empresa Provincial de la Energía (EPE), explicó a este diario que este nuevo temporal retrasó las tareas que comenzaron a realizarse tras el anterior.
“El día empezó con 14 líneas de media tensión fuera de servicio. La prioridad son los inconvenientes de media tensión porque es donde convergen mayor cantidad de clientes. A últimas horas del día (por ayer) estarían terminándose de resolver, salvo algún inconveniente por el que el personal considere que es necesario esperar”, dijo.
Antruejo especificó que los trabajos en baja tensión son muchos y habrá que reprogramar tareas que van a tardar varios días en solucionarse ya que los inconvenientes son de lo más variados. “Hay cables cortados, faltan fases, estamos contratando cuadrillas para despejar sectores, es un trabajo uno por uno. Ingresaron más de 400 reclamos que puede abarcar tanto a un cliente como a una manzana”, concluyó la funcionaria.
Los desperfectos informados se registrabron en las zonas delimitadas por Dorrego, Arijón, Ayacucho y arroyo Saladillo; Espinosa, Larrea, entre otros. También en los barrios Hostal del Sol, Aldea, San Eduardo, Provincias Unidas, Tupac Amaru y Colombres; Virasoro, avenida Francia, entre otros.
Con todo, el ex Nacional Nº 2 se llevó la peor parte debido a la caída de un muro en el patio de la institución. La estructura se vino abajo en medio de la tormenta, mientras varios chicos daban examen en las aulas ubicadas que no estaban tan lejos de allí. Hasta el miércoles próximo habrá actividad.
“Hace dos años y medio estamos pidiendo que vengan a revisar la arquitectura de la escuela”, contó Carlos, preceptor del turno tarde de la escuela.
Según el preceptor, las autoridades del colegio hicieron el reclamo ante el Ministerio de Educación de Santa Fe pero hasta el momento sólo se realizaron relevamientos del mal estado de la institución.
“Tenemos problemas en la estructura del patio y las rajaduras están llegando a las aulas”, soltó Carlos y para de inmediato agregar: “Si esto pasaba un día normal de clases, estábamos hablando de una tragedia”.
Agua y luz para Cabín 9
Ante los constantes cortes de luz y falta de agua potable en el barrio Cabín 9, el concejal Carlos Cardozo, del Frente Pérez Cambia, solicitó la urgente intervención a las autoridades para brindarle soluciones al barrio. “Es imposible poder vivir de manera digna, con la falta de provisión de servicios tan esenciales como el agua y la luz. La realidad que viven los ciudadanos de Pérez amerita una intervención urgente”, sostuvo. La prestación del servicio de energía en Cabín 9 depende de la EPE de Rosario, por lo cual las autoridades de Pérez no brindan una solución. Y el servicio de agua potable del barrio depende de Aguas Santafesinas, y no de la cooperativa local de Pérez.
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