* Por Jorge Santiago Rojas
El 13 de marzo de 2013 el padre Mario Bergoglio, Argentino, Sudamericano, nacido en el fin del mundo, se convertía en el Primer Papa de estas latitudes y tomaba como nombre Francisco en honor a San Francisco de Asís, uno de los padres de la iglesia que hizo de la austeridad una forma de vida. Ese 13 de marzo será recordado en la historia como el inicio del Papado de los excluidos del mundo, de las periferias existenciales.
En el presente, este Papado está cumpliendo 10 años de su misión eclesiástica, marcando su mandato con una impronta propia: el retorno a la peregrinación. Al llegar al Vaticano, el Papa Francisco se propuso que la Iglesia Católica vuelva a sus orígenes de peregrinación y salga en búsqueda de los más humildes. Asimismo, buscó reafirmar el papel de la Iglesia como actor con voz y capacidad propia para denunciar los distintos males que aquejan en el presente a la humanidad toda, entre ellos, la crisis ambiental existente y las consecuencias del paradigma económico actual.
En estos 10 años Su Santidad el Papa Francisco estuvo en 4 de los 6 continentes del Mundo: África, América, Asia y Europa. En total llevó a cabo 40 viajes por el mundo y tan solo 26 por la península itálica. De estos viajes, 12 fueron realizados en el continente de procedencia, América, 10 en África, 16 en Asia y 20 por el viejo continente.
En el siguiente mapa se observa cuáles fueron los países de los 4 continentes que recibieron la visita del sucesor de Pedro y obispo de Roma.
Durante su primer año de mandato en ocasión de la Jornada Mundial de la Juventud, el Papa visitó Brasil, siendo este su único viaje a lo largo del 2013. De 2014 a 2018 su peregrinación lo llevó a recorrer múltiples destinos atravesados por circunstancias disímiles y a exponer ante distintos organismos internacionales. A lo largo de este periodo se destacan la visita a Tierra Santa (Palestina, Israel y Jordania), la participación en el II Encuentro de los Movimientos Sociales en Bolivia, la participación en el proceso de distensión entre Cuba y Estados Unidos tras años de bloqueos y la visita a refugiados en Lesbos-Grecia. Asimismo, también se hizo presente en Armenia y Azerbaiyán – dos naciones en conflicto-, y visitó países como Kenia, Sri Lanka, Colombia, Albania, Turquía, Bosnia y Herzegovina, entre otros.
El período de 2018 y 2019 fue la etapa de mayor dinamismo, a lo largo de estos años viajó por todos los continentes visitando países como Chile, Perú y Panamá en América; Suiza, Irlanda, Bulgaria, Macedonia del Norte, Rumania, Lituania, Letonia y Estonia en Europa; Marruecos, Mozambique, Madagascar y la isla de Mauricio en África, y, por último, Emiratos Árabes, Tailandia y Japón en Asia.
Tras el 2020, año marcado por la Pandemia Covid-19, recién en 2021 retornó a su actividad peregrina frente a un mundo que lo estaba esperando. Desde el 2021 hasta el presente su Santidad ha continuado su misión viajando por distintos países como La República Democrática del Congo, Canadá, Irak, entre otros, llevando un mensaje de paz y amor entre los pueblos. De esta manera vemos como el argentino que llegó al Vaticano supo hacer de su papado un puente entre pueblos, religiones y culturas tan disímiles entre sí. En estos viajes, reafirmando el valor de la escucha, se reunió con todas las religiones y sectores de la sociedad civil, dejando un sinfín de mensajes que este artículo pretende brevemente exponer.
* Jorge Santiago Rojas – Licenciado en Relaciones Internacionales
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