«Yo espero, como presidente de Chile, que podamos lograr este lunes o martes tomar contacto con los mineros y terminar esta situación que ha producido tanta angustia y dolor», dijo Piñera durante una visita al yacimiento, según consigna la agencia ANSA.
Son 33 los trabajadores que han quedado enterrados tras el derrumbe en la mina de cobre y oro San José, ubicada 800 kilómetros al norte de Santiago.
El ministro de Minería, Laurence Golborn, informó que la máquina de sondaje se encuentra a 180 metros del sector donde se presume están atrapados los obreros.
Por otra parte, Piñera enfatizó que el gobierno tiene «plena conciencia que a nivel de la empresa no se cumplieron las normas de seguridad». Y concluyó: «Las responsabilidades no van a quedar impunes, serán investigadas y una vez que estén determinadas serán debidamente sancionadas», aseguró el presidente.