El periodista Cristian Alarcón, director de la revista Anfibia y Cosecha Roja, lanzó un hilo de tuits advirtiendo sobre la compleja situación que atraviesan los medios de comunicación y sobre el precipitado final hacia donde van si desde el Estado no se toman medidas para que sobrevivan. Y llamó a un debate para poder generar un periodismo plural, donde todos los que hacemos medios podamos sobrevivir en la compleja situación que atravesamos. Los tuits son un llamado a abrir un debate necesario entre las distintas organizaciones y funcionarios para llegar a un acuerdo y evitar así la desaparición de los medios de comunicación,
Alarcón cuenta que hace 6 meses, en la Conferencia Latinoamericana de Periodismo de Investigación, “me atreví a enunciar una hipótesis temeraria: el sistema de medios desaparecerá en 10 años. Después de la pandemia mi preocupación se agiganta, el proceso de desintegración está en marcha”, sostiene.
Y advierte que este escenario obliga a quienes hacemos medios y sobre todo a quienes estamos en puestos de decisión a fomentar y demandar soluciones ciertas para el periodismo sobre todo en América Latina. “En Argentina, sepultada la ley de medios y según el discurso de Alberto Fernández sobre el fin de la relación corrupta con el periodismo famoso, es hora una política pública inteligente y sustentable para enfrentar esta crisis que va más allá de la infodemia, las fake news y el espionaje absurdo y patético hecho por el gobierno anterior, la discusión debe plantear el asunto medular: cómo se asumirá en nuestro sistema democrático, donde el rol del Estado es crucial, la responsabilidad de garantizarle a les ciudadanes la calidad, la fluidez y el acceso democrático a la información de calidad y el relato social”.
Y agrega el periodista y maestro de la Fundación Gabo, la discusión pendiente involucra a legisladorxs, funcionarixs, organizaciones de periodistas, sindicatos y a las universidades que aún intentan formar periodistas para un mundo que ya no existe.
“Simular que el barco no se hunde solo puede acelerar la velocidad de la catástrofe. Desde el siglo XIX este es un país de grandes periodistas: de Fray Mocho a Roberto Arlt, de Walsh a Tomás Eloy, de las grandes revistas al periodismo comunitario, de los grandes diarios a la renovación y el aire fresco que trajo el periodismo feminista. Apenas amenazado por la monstruosidad banal de la grieta, el periodismo argentino aún sobrevive”, advierte,
“Somos muches les que nos despertamos todos los días para correr detrás de las noticias. Les que disfrutamos del oficio cuando logramos molestar, que intentamos renovar las prácticas, innovar en los formatos, experimentar con un periodismo creativo; ese trabajo cotidiano incesante nos da el derecho a ser conscientes de lo ya indisimulable. Y el derecho a demandar al Estado una solución; el derecho a asumir este debate y pensar cuál es la salida”.
Tal vez, dice Alarcón, un modo de comenzar sea la excelente síntesis de Martín Becerra. #Allí sea el llamado de atención sobre la brecha entre 2 mundos ajenos: lxs famosxs de la tv y la radio vs la inmensa mayoría de lxs periodistas de a pie. Imprescindible tener en cuenta el reclamo desesperado de los medios cooperativos para que se democratice el acceso a la pauta oficial”.
El Sindicato de Prensa Rosario pidió gravar con impuestos a las grandes plataformas digitales (Google, Facebook, Apple, Amazon) que se benefician del trabajo de lxs periodistas argentinxs.
Y detalla que en el resumen de Becerra, el asunto económico emerge como lo más preocupante. “Sumo que las discusiones que deberíamos darnos son cuestiones de fondo sobre el verdadero rol que jugaremos les periodistas en el mundo post pandemia, un infierno temido al que apenas avizoramos”.
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