Si bien hasta el momento no hay casos confirmados de escruches en la ciudad que surjan de datos tomados por los ladrones de las redes sociales como Facebook y Twitter, la Unidad Regional II de Policía y el representante de la Fiscalía Nº 3, Carlos Covani, recomendaron no publicar información personal que sirva a los “sapos”. En la jerga policial, el “sapo” es quien se encarga de averiguar los movimientos de una casa, empresa o negocio para luego “marcarla”, esto es, señalar las particularidades a sus cómplices delictivos. El trabajo de inteligencia, según supuso Covani, también se hace en las redes sociales. El fiscal advirtió que en la actualidad la gente no maneja las medidas de seguridad que ofrecen las redes sociales, “ni que mucha de esa información se puede filtrar más allá de aquellas personas que uno tiene etiquetados como amigos”. Según el funcionario, es sencillo para los ciudadanos ingresar a una red, que en general son abiertas. “Cualquier persona que «googlea» tu nombre se encuentra con tu Facebook o tu Twitter, lo que significa un riesgo potencial para las personas”, añadió Covani.
Según el funcionario, falta conciencia sobre los riesgos que existen al navegar por internet. “Es complejo rastrear cómo se accedió a una cuenta, pero se puede hacer; en esos casos se puede identificar quién accedió y robó la información”, apuntó. El fiscal enfatizó que hay que tener sumo cuidado con quién se comparte información en Facebook y Twitter y no sólo sobre los movimientos que hará en las vacaciones, sino también los cotidianos.
“Es muy peligroso contar qué hace uno a diario, en determinados horarios, porque eso le da una pauta de en qué momento uno deja la casa sola, a merced de los delincuentes”, añadió Covani. Y agregó: “Uno no toma conciencia de que hay gente que está pendiente de captar información y se aprovecha de eso, la vida en sociedad tiene riesgos y uno de esos riesgos son las redes sociales”.
La subsecretaria de Cultura y Educación municipal, Mónica Peralta, manifestó la necesidad de tener un arduo control de la información personal que se publica en este tipo de medios, así como la importancia de formar en los chicos usuarios responsables de las nuevas tecnologías. Cabe recordar que la funcionaria presentó en su período como diputada provincial (2003/2011) un proyecto para “generar las herramientas necesarias y fomentar la cooperación de todas las instituciones públicas o privadas, así como también de los ciudadanos con el objetivo de promover el uso seguro responsable de las TIC’s para los niños, niñas y adolescentes”. El proyecto fue presentado por primera vez en 2009 y fue reingresado el año pasado.
“Trabajamos en un proyecto que lo presentamos en Diputados dos veces, pero nunca fue tratado”, expresó Peralta.
Entre los pormenores del proyecto, Peralta propuso campañas de formación en todo el territorio santafesino con enfoque en el entorno escolar y los cibercafés. El objetivo primario fueron los menores aunque extendió la iniciativa a profesores, educadores y padres. Además, se propuso producir y difundir materiales didácticos que puedan ser utilizados tanto en las campañas en los colegios como en otras campañas ligadas al uso seguro de Internet, de la telefonía móvil, diversas formas de ocio digital como es el caso de los videojuegos.
“El énfasis tiene que estar puesto en un trabajo constante sobre la educación y la cultura, porque las redes digitales son parte constante y vital de nuestra experiencia cotidiana”, comunicó la ex diputada.
El “sapo” tecnológico también se puede hacer de la información a través de los hijos de la familia. En una encuesta online realizada por la subsecretaria de Cultura y Educación en 2009 se comprobó que el 60 por ciento de los chicos de Rosario agrega a desconocidos a su cuenta de Messenger.
Además, el 31 por ciento reconoció que publica su e-mail en sitios webs donde puede ser visto por gente que no conoce. Otro dato es que el 13 por ciento de los adolescentes rosarinos publica la dirección o el teléfono de su casa o escuela en blogs, fotologs o grupos como Facebook.
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