Edición Impresa

El oficialismo insiste con un Presupuesto “sin cambios”

Buscará aprobarlo mañana en sesión especial, manteniendo estimaciones de inflación y crecimiento.

El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, y el presidente del bloque oficialista en Diputados, Agustín Rossi, salieron ayer a respaldar el proyecto de Presupuesto 2011, y confirmaron que mañana intentarán su aprobación, sin tocarle una coma, en una sesión especial convocada por el presidente de la Cámara baja, Eduardo Fellner, después de la fallida sesión de la semana pasada donde el proyecto volvió a comisión y dirigentes de la oposición acusaron al oficialismo de intentos de sobornos. 

“Tocar una variable complica la situación, sobre todo en cuestiones que se están hablando en estos días como inflación, crecimiento y pago con reservas”, dijo ayer Fernández, al descartar la posibilidad de introducir modificaciones en el proyecto oficial.

“Que hoy se quiera tirar abajo la posibilidad de pagar con reservas no tiene ningún sentido”, aseguró el jefe de Gabinete en alusión a uno de los puntos resistidos por el arco opositor, y recordó que en marzo pasado, cuando se decidió el pago de deuda externa con reservas, el país contaba con 47.714 millones de dólares y ahora tiene 52.200 millones.

Con relación a las pautas de inflación y de crecimiento incluidas en el proyecto oficial de presupuesto 2011, discutidos por la oposición por su tendencia a una baja estimación, Fernández dijo que “nunca se trabaja en un presupuesto desde el punto de vista optimista, sino en términos pesimistas”.

“Es como si uno tuviera un sueldo de 30 pesos. Lo primero que debiera decir es que no puede gastar más de un peso por día. Eso no me garantiza que yo voy a ahorrar pero por lo menos me garantiza que no voy a perder. Uno se debiera rebuscar para ahorrar en la medida de lo posible”, afirmó.

En tanto, el presidente del bloque de diputados del kirchnerismo, Agustín Rossi, le pidió a la oposición que debata esa iniciativa para que “la presidenta Cristina Fernández tenga un presupuesto como tuvieron todos los presidentes”.

“Si la oposición se niega a tratar el presupuesto sería la primera vez que en democracia se le está negando a un presidente que pueda tener aprobado su presupuesto”, apuntó Rossi con respecto a la idea de un sector de la oposición que busca quebrar la posibilidad de reunir quórum. 

En cuanto a las denuncias de Elisa Carrió sobre supuestos pedidos de compra de votos, Rossi dijo que “son una gran operación política que tiene como fin evitar que se apruebe el presupuesto, porque nadie tiene ninguna prueba de nada”.

Rossi también señaló que la postura de su bloque es que los dictámenes de comisión “son válidos” y se pueden volver a tratar mañana en el recinto de sesiones. El diputado también indicó que “existen antecedentes” de haber devuelto un dictamen a comisión y que se haya tratado en el recinto de sesiones sin que lo que haya hecho la comisión, refiriéndose a una situación planteada en 1986, cuando la Cámara de Diputados que conducía Juan Carlos Pugliese decidió debatir un dictamen sobre IVA que había sido devuelto a la comisión.

El PS no quiere “libro cerrado”

“Para nuestro sector político no cambió nada. Nosotros queremos que el país tenga presupuesto, pero esto no quita que hagamos planteos para que se den algunos cambios fundamentales”, dijo la diputada nacional del Partido Socialista, Mónica Fein, quien pidió “eliminar la discrecionalidad que tiene el Ejecutivo sobre el presupuesto y fortalecer el federalismo”.

“El oficialismo se puso muy duro y no quiere cambiar ni una coma. Estamos en una situación compleja porque el Parlamento no es una escribanía del Poder Ejecutivo”, dijo Fein, para quien el oficialismo debería convocar a la Comisión de Presupuesto. De no ser así, la legisladora aclaró que “el socialismo no va a acompañar el presupuesto a libro cerrado”.

Comentarios