Liverpool derrotó 1 a 0 a Flamengo con gol del brasileño Roberto Firmino a los nueve minutos del primer tiempo suplementario, y se consagró campeón del Mundial de Clubes.
El partido se jugó en el Estadio Internacional Khalifa, en la ciudad de Doha, con el arbitraje del qatarí Abdulrahman Al Jassim y allí los se consagraron por primera vez campeón del mundo, tras su cuarta final, luego de las derrotas ante el propio Flamengo 3-0 en 1981, frente a Independiente 1-0 en 1984 y contra San Pablo en 2005, también por 1-0. Mientras que para los brasileños fue su segunda final, luego del citado triunfo ante los Reds.
Antes, Monterrey de México se había quedado con el tercer puesto luego de vencer por penales a Al-Hilal de Arabia Saudita 3-2, tras empatar 2-2 en el tiempo regular y el suplementario. Así, los dirigidos por el Turco Mohamed se subieron al podio del certamen.
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