Economía

Nada para celebrar

El malestar empresarial se hizo eco en el Día de la Industria

Unos 800 empresarios se reunieron para conmemorar el Día de la Industria: coincidieron en que en la gestión Macri el sector fue un gran perdedor y cifraron expectativas en que el nuevo gobierno “saque el pie de encima” de la producción

PH: Franco Trovato Fuoco

Las quejas por la política económica del macrismo que ha llevado al sector industrial a la ruina, en especial a las pymes, y la expectativa por el recambio de gobierno marcó la celebración del Día de la Industria que se llevó adelante en el salón Domo de Rosario y de la que tomaron parte unos 800 industriales de todo el país, con organización de la Federación Industrial de Santa Fe (Fisfe), la Asociación de Industriales Metalúrgicos (AIM) y la Unión Industrial Región Rosario (Unirr). Estuvieron también el gobernador Miguel Lifschitz, la vicegobernadora electa Alejandra Rodenas, la intendenta Mónica Fein, quien será su sucesor, Pablo Javkin, además de funcionarios y legisladores nacionales y provinciales. “Si tenemos en cuenta que para declarar ciudad a una localidad se necesitan 10 mil personas, lo que se perdió fue una ciudad”, dijo el secretario de Fisfe, Walter Andreozzi sobre los empleos perdidos en Santa Fe. A nivel nacional los números son críticos también: cerraron 20 mil industrias, lo que representa unos 200 mil puestos de trabajo.

Miguel Acevedo, presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), describió un diagnóstico del momento actual del país: “Es una situación difícil, complicada, tenemos que empezar a ver un poco más a largo plazo que estar tanto en la coyuntura. Cuando venía a Rosario pasé por una fábrica que está en el parque industrial y bueno, yo lo que estoy escuchando es transversal a todas las industrias. La situación por el crédito, la tasa de interés, el tema de exportar: cómo se va a poder exportar. Pero la industria está, tiene potencial, tiene capacidad, puede ser competitiva. No es que sea antigua, moderna, si no competitiva. Pero igual que en todo el país es una cuestión de sacar un poco el pie de encima. Se necesitan medidas inmediatas para reactivar la industria, para salir de esta coyuntura lo antes posible, volver a recuperar la confianza”. Y agregó: “La caída de la actividad, la falta de acceso al crédito, el aumento de la capacidad ociosa, el incremento de tarifas y un sistema tributario que penaliza el agregado de valor, han sido un golpe letal para las pymes. Estamos trabajando para que quienes tienen que gobernar a partir del 10 de diciembre comprendan este problema”.

Víctor Sarmiento, presidente de Fisfe, añadió: “Este modelo de industria nacional no nos contiene. Nosotros vamos a estar solicitando que se tenga como política industrial una política de Estado que nos permita desarrollarnos, nos permita generar valor y trabajo digno. En Santa Fe, del 2015 al 2019, han cerrado 400 empresas y 330 empresas están en procedimiento preventivo de crisis. Y si esto no es una emergencia dígame usted qué está pasando”. Y añadió Andreozzi, secretario de la misma entidad: “Nosotros venimos indicando la necesidad de un modelo de desarrollo industrial. Argentina tiene que recuperar la fuerza industrial. Un país con 48 millones de habitantes no tiene destino para todos sin la industria, sin un modelo industrial”.

Por su parte, Javier Martín, presidente de la Unión Industrial de Santa Fe, afirmó sobre el bono de 5 mil pesos que el gobierno nacional definió para el sector privado: “El bono es una medida necesaria porque el salario ha venido cayendo con la inflación pero las pymes están en una precariedad económica y financiera terrible y en muchos casos no están en condiciones de pagar. Lo podrán hacer algunas, pero hay una gran mayoría que no lo puede pagar. En Santa Fe hay más de 440 industrias que han cerrado en los últimos 24 meses y hemos perdido más de 8.000 puestos de trabajo. Es preocupante”.

En el mismo sentido se expresó uno de los dirigentes sindicales presente, el secretario general de la delegación Rosario de la Unión de Obreros Plásticos y Afines, José Orpianessi, quien sostuvo que el sector que representa está en crisis. “La materia prima es importada, el valor del dólar hace imposible que las empresas puedan seguir trabajando. Uno siempre espera, tiene esperanza de que esto cambie, pero en este momento lo vemos muy mal. No sé qué irá a pasar, por más que cambie el gobierno no va a ser algo tan rápido el crecimiento de las empresas. Estamos tratando de cuidar los puestos de trabajo más que sacar un buen aumento de la paritaria. El último que sacamos dentro de todo fue bueno, pero vas negociando”.

 

Voces oficiales

En tanto, el gobernador Miguel Lifschitz señaló: “Tenemos una industria con un gran potencial, un sector industrial muy dinámico, muy competitivo. Lamentablemente las condiciones del contexto nacional no ayudan pero es un sector que va a recuperarse rápidamente en la medida que el país se ordene en su macroeconomía. A cada localidad que voy lo primero que me piden los intendentes o jefes de comunas es desarrollar un parque industrial o mejorar el que tienen, porque todos entendemos que no hay desarrollo ni futuro sin industria”.

Fernando Grasso, el secretario de Industria de la Nación, que estuvo en el almuerzo, reconoció que “han sido dos años difíciles para el sector”, pero las “mesas sectoriales” tuvieron un avance. “Sería necio negar que el contexto macroeconómico no ha sido bueno, y no tenemos que ponernos colorados. Es verdad que Argentina hace décadas que viene cerrada y en estos cuatro años no pudimos resolver los problemas estructurales”, admitió.

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