Convencidos que el plan de gastos e ingresos para el año que viene germinará de la prórroga del Presupuesto 2010, el oficialismo intentará igualmente conseguir los votos necesarios en el Congreso para sancionar la ley de leyes.
“Con el mecanismo de vuelta (del proyecto) a Comisión se está evaluando pedir un nuevo tratamiento del Presupuesto”. El jefe del bloque K en Diputados, Agustín Rossi, considera que lo más conveniente es convocar a otra sesión especial para debatir el proyecto sobre tablas el próximo miércoles en el recinto, sin necesidad de volver a reunir a los legisladores de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, que preside el kirchnerista Gustavo Marconato.
Con el cierre de las sesiones ordinarias a la vista (30 de noviembre), el santafesino cree que un tratamiento exprés de los tres dictámenes no aportarán nada nuevo. El Gobierno no está dispuesto a cambiar una coma de su texto. Radicales, cívicos y peronistas federal, que firmaron en conjunto, tampoco. Los solanistas de Proyecto Sur, que en su dictamen avalaron el uso de reservas para pagar deuda, no quieren embrollarse con el resto del arco anti-K. De este modo, si avanza la idea de tratar otra vez los tres dictámenes en la Comisión de Marconato, se repetirá la votación anterior: el oficialismo sacará el suyo en mayoría y la oposición llevará a la votación otros dos de minoría. Si eso ocurre, será el próximo miércoles dos horas antes de la sesión.
La idea de mandar la norma de vuelta a las comisiones surgió de Claudio Lozano, de Proyecto Sur, luego de que la oposición fracasara en su intento de pasar a un cuarto intermedio y que los K no lograron aprobar la inciativa. Esa votación (117 a 112) se dio luego de que los distintos bloques anti-K denunciaran “presiones” e intentos de sobornos de parte del Gobierno para sumar respaldos. Para dilucidar corruptelas, la Cámara abrió una investigación pedida por Elisa Carrió, pero con nulas posibilidades de éxito.
Ante ese panorama, el jefe de la bancada oficialista dijo que “lo que pasó el miércoles es una tomada de pelo” y aseguró que la jefa de la Coalición Cívica hizo denuncias sobre supuestos pactos con los radicales “porque nos dieron quórum”.
Con el tiempo que queda hasta el final de las ordinarias, previsto para el próximo 30 de noviembre, es complicado que se logre aprobar la ley en las dos Cámaras. Ý si se tiene en cuenta que no hay intenciones de abrir extraordinarias, se abre una fuerte posibilidad de que el Gobierno extienda el Presupuesto 2010 hasta el año que viene. “Si no se aprueba, que se hagan responsables los que votaron en contra de que la Argentina no tenga presupuesto”, advirtió Rossi.
En la Casa Rosada siempre valorizaron la opción quedarse sin plan. Reconducir el de 2010 permite ahorrar limitaciones en el gasto durante el año electoral, y para saldar deudas con reservas del Banco Central, Cristina de Kirchner no tendrá inconvenientes en apelar a los DNU.
Comentarios