La Justicia avanza sobre el control de la caja en el Parque. Finalmente, el juez Fabián Bellizia sacó la anunciada resolución que determina un seguimiento estricto de la economía leprosa. Y si bien la dirigencia seguirá teniendo autonomía en la administración del club, todos los pagos deberán pasar por la supervisión del juzgado.
Bellizia ordenó la apertura de una cuenta corriente en el Banco Municipal sucursal Tribunales, donde además de los directivos avalados estatutariamente, también será firmante el contador Ricardo Schneir, uno de los tres miembros del Órgano Fiduciario.
El magistrado pretende que todos los pagos del club pasen por la nueva cuenta y por eso ordenó notificar al banco Credicoop que se abstenga de darle nuevas chequeras al club. Si bien habrá un tiempo donde seguirán presentándose cheques ya emitidos, la idea es que antes de fin de año todo pase por la cuenta del Municipal, donde además el juez ordenó pasar las cuentas sueldos de empleados y jugadores.
Bellizia justificó esta medida a partir de las diferencias que encontró entre el dinero pagado a los futbolistas y los contratos registrados en AFA, algo que sorprendió al magistrado cuando hace un mes se reunió con Sergio Marchi en Agremiados.
Otra preocupación del juez son los más de 100 cheques devueltos que registra la cuenta corriente del Credicoop, muchos de ellos correspondiente a jugadores. Y también pretende seguir más de cerca el pago de retenciones impositivas y aportes previsionales.
Una primera idea de Bellizia era crear la figura de un gerente judicial, pero luego entendió que esa misión estaba claramente especificada en la Ley de Salvataje y correspondía al Órgano Fiduciario, con quien en las últimas semanas mantuvo mayores reuniones para definir los pasos a seguir y solicitarle un mayor control sobre los movimientos financieros del club.
Hasta ayer, el juez autorizaba los contratos de futbolistas, las ventas y préstamos, y retenía el 15 por ciento de los ingresos generales, dinero que queda en una cuenta judicial del Banco Municipal. Con eso se garantiza el pago anual de unos 21 millones de pesos a los acreedores surgidos del Salvataje de la era López.
Pero ahora avanza aún más y cada cheque emitido deberá tener su aprobación, lo que le resta poder a la tesorería leprosa.
Esta medida surge una semana antes de la realización de la Asamblea de aprobación de Memoria y Balance del ejercicio 2016/17, y que está enmarcada en un fuerte ambiente político interno, con muchos cuestionamientos de los grupos opositores, que hace algunos meses no aprobaron el presupuesto, pero posiblemente se abstengan de votar a favor del Balance como sucedió hace un año, ya que rechazarlo podría implicar la intervención del club.
