El juez federal Marcelo Bailaque, a cargo de la causa que investiga la desaparición forzada de Gerardo Pichón Escobar, notificó su decisión de excusarse de realizar la investigación y dispuso remitirla al Juzgado Federal Nº 3 de Rosario. La decisión ocurre luego de que una decisión de cámara anulara el sobreseimiento que dictó el magistrado a los cinco acusados por el hecho, tres vigiladores privados y dos policías que cumplían adicionales en el boliche donde el joven fue visto por última vez con vida.
En la última audiencia, que se llevó a cabo en la Cámara Federal de Apelaciones, tanto la Fiscalía como la querella habían solicitado el apartamiento del magistrado, pero no encontraron respuesta favorable.
Desde la querella que representa a la hermana de Gerardo, sostienen que la resolución que sobreseyó a los cinco imputados es “escandalosa, arbitraria y roza el mal desempeño del juez”. Y agregan: “Hay afirmaciones puramente dogmáticas sin remitirse a los elementos de prueba y omite otros que son relevantes y de cargo”, cuestión por la cual insistían en que Bailaque no podía continuar interviniendo en la causa.
Escobar, trabajador municipal, fue visto con vida por última vez el 14 de agosto de 2015 a la 5.45 al salir del boliche La Tienda, en Tucumán al 1100. Su cadáver fue hallado en el río Paraná el 21 de agosto siguiente.
El 18 de noviembre pasado, la Cámara de Apelaciones de Rosario había anulado el sobreseimiento dictado por Bailaque a los cinco acusados de la desaparición de Gerardo Pichón Escobar: los custodios del boliche La Tienda Cristian Vivas, César Ampuero y José Luis Carlino, y los policías que hacían adicionales Luis Noya y Maximiliano Amiselli. El tribunal había definido la falta de mérito para ese medida del magistrado, por lo que habilitaba la continuidad de la investigación del hecho.
Comentarios