El refugio municipal para personas en situación de calle vivió un fin de semana con capacidad al máximo. El frío que comenzó a sentirse fuerte el viernes y la lluvia de ayer pusieron a prueba la infraestructura que funciona en Grandoli al 3400 en la zona sur de la ciudad. Baño, cena y a la cama, la asistencia se completa con un desayuno a cargo de los ex Combatientes de Malvinas. El otro refugio, Sol de Noche, también trabajó a capacidad completa.
Las bajas temperaturas de los últimos tres días hicieron que parte de la población en situación de calle estable, entre 100 y 120 indigentes, se volcaran a los sistemas de asistencia municipales de la ciudad. Con el invaluable aporte de los ex Combatientes, que participaron de los recorridos dela Guardia UrbanaMunicipal para brindar alimento y abrigo, el refugio municipal ubicado en Tablada colmó su capacidad durante el fin de semana. Entre 25 y 28 personas en situación de calle por día tomaron un baño, recibieron una cena y durmieron hasta las primeras horas de la mañana. Un desayuno a cuenta de los ex Combatientes completa la asistencia.
María Fernanda Tamous, a cargo del refugio municipal de Grandoli al 3400, que funciona en la ciudad desde el año pasado, contó que tuvieron que agregar colchones para afrontar la demanda. “Es complejo trabajar durante la noche. Somos cuatro personas y contamos con el apoyo de los ex Combatientes. Las horas más fuertes son desde el ingreso –a las 20– hasta que se van a dormir, alrededor de las 22 horas”, detalló la funcionaria de Promoción Social municipal.
Respecto a la rotación de personas en el refugio, Tamous explicó que generalmente se reserva la cama para el día siguiente. Si esa persona no se presenta, es ocupada por otra en lista de espera.
La convivencia no es sencilla, admitió Tamous, en particular porque muchas de las personas en situación de calle incurren en ingestas de alcohol, lo que deriva en algunos “encontronazos” entre ellos. De sencilla resolución y sin lamentar incidentes, desde el personal aseguraron que están preparados para manejar estas situaciones.
El refugio funciona todos los días de18 a8 horas de forma coordinada con el Sistema Integrado de Emergencia Sanitaria (Sies), y el refugio Sol de Noche (atendido por jóvenes voluntarios y con 54 camas disponibles) y GUM.
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