Guillermo Dellacasa
Un dólar sin freno sigue generando cada vez más incertidumbre. Este viernes volvió a marcar un nuevo récord histórico al dispararse 42 centavos y cerrar a 28,84 pesos para la venta.
La designación de Luis Caputo al frente del Banco Central, en reemplazo del renunciante Federico Sturzenegger, lejos estuvo de calmar la avidez por la divisa norteamericana por parte de un mercado que parece haber perdido toda confianza en el destino que marca el gobierno para la economía.
Obedeciendo a los requerimientos del FMI, el Banco Central dejó que el billete volara hasta donde le den las alas, convalidando su precio a lo largo de una jornada con bajo nivel de operaciones que alcanzaron los 590 millones. Mientras el FMI “aconsejó” un dólar flotante, la economía parece hundirse un poco más cada día.
El clima de incertidumbre persiste y varios operadores cambiarios coinciden que la corriente compradora continuará, al menos, en el corto plazo. Además puntualizaron que la expectativa del mercado se mantendrá por la licitación de bonos de hasta 4.000 millones de dólares que se llevará a cabo el próximo lunes con el objetivo de reducir el abultado volumen de Lebac que vence el martes (ver aparte).
La fenomenal depreciación del peso se da en medio de una carrera imparable y en la que el Banco Central actuó como mero espectador en los últimos días. A lo largo del año, la moneda norteamericana tuvo un fenomenal avance de 50,2%.
El economista y docente de la UNR Sergio Arelovich, en diálogo con El Ciudadano, reconoció no ser optimista con el futuro inmediato. Desde su punto, el único que le puede poner freno a la escalada del dólar es el Banco Central y está demostrando no tener interés en ponerle el pie encima.
Con relación a la salida de Sturzenegger del BCRA, Arelovich cree que el reemplazo no traerá ningún cambio positivo y que la designación de Caputo, a quien considera que no le da el piné, es circunstancial ya que es el Congreso el que debe nombrar al presidente de la entidad monetaria.
Con respecto al primer desembolso 15.000 millones de dólares por parte del FMI, de los cuales 7.500 millones el gobierno supuestamente inyectará al mercado, Arelovich sostiene que esto no influirá demasiado en la cotización del dólar, ya que 5.000 millones son para reponer las reservas internacionales y sólo el resto podrá salir a la venta a la plaza.
En tanto, el economista Daniel Guida, le indicó a El Ciudadano comparte el punto de vista con su colega. “A esta situación se llega por las malas políticas económicas empleadas por el gobierno y por la desconfianza que ellos mismos generaron. Está pasando lo que tenía que pasar”, subrayó Guida.
Con respecto al acuerdo con el FMI, el integrante de la Fundación Pueblos del Sur, sostuvo que es “todo una fantasía. Los 15.000 millones de dólares que llegarán son excepcionales y es mentira que parte de este desembolso se vaya a utilizar en calmar al mercado. Es una incongruencia más del gobierno ya que el mismo FMI «ordena» un dólar libre”.
“La supuesta calma que traería a los mercados esta entrada de dinero es únicamente para los especuladores, que saben que ni no les paga el BCRA, el organismo internacional les asegura que van a cobrar”, comentó Guida.
“Los únicos ganadores de este modelo económico son los inversores extranjeros que llegan para especular y los productores que hacen formidables ganancias. Ellos son los que sacan provecho de la salvaje devaluación que generó el gobierno. Desde que asumieron en 2015 el peso se depreció el 200%, algo inadmisible, avizorando un panorama de total incertidumbre con menos empleo, cierre de fábricas, mayor pobreza y más endeudamiento”, reconoció Guida.
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