En el mercado marginal, el dólar paralelo trepó 5 pesos este jueves y llegó a 138 pesos, con lo cual, la brecha cambiaria con el tipo de cambio oficial superó el 100%, la diferencia más alta desde la hiperinflación de 1989.
El contado con liquidación (CCL) y el Mep (dólar bolsa) no siguieron este camino. El Mep se vendió a 119,35 pesos con una baja del 2,8%. El contado “con liqui” se ofreció a 122,04 pesos con un retroceso del 3%. Por su parte, el mayorista tuvo su clásico salto diario de escasos centavos y se operó a 67,64 pesos y el promedio minorista se ubicó en 69,92 pesos.
Así, el dólar con el recargo de 30% -contemplado en el impuesto País- culminó la rueda en un valor final de 91,06 pesos.
El incremento del blue ocurrió en un mercado con pocas operaciones, pero persiste la incertidumbre sobre la negociación de la deuda de la Argentina con los bonistas.
Los especuladores rechazaron la oferta inicial y si no hay acuerdo el país podría entrar en default. Por este motivo los inversores prefieren dolarizarse.
Otros factores que presionan al aumento de tipo de cambio paralelo son: la inestabilidad por la crisis previa y potenciada por la pandemia de coronavirus, y por la menor liquidación de dólares de los agroexportadores, entre otras causas.
Este bajo dinamismo del tipo de cambio oficial no significa que no haya una presión por el aumento del blue. Sucede que el Banco Central (BCRA) volvió a intervenir sostenidamente.
El miércoles, la máxima autoridad monetaria debió vender 80 millones de dólares de reservas y este jueves se observó un comportamiento similar en el mercado de futuros a corto plazo, según destacan fuentes del mercado.
En este contexto, el riesgo país volvió a subir luego de varias jornadas a la baja y ahora supera los 3.100 puntos básicos.
Protagonismo del BCRA
Gustavo Quintana, analista de PR Corredores de Cambio, dijo que fue la rueda con menor volumen negociado en mayo y que durante la misma “el Banco Central volvió a ser protagonista, siendo el principal proveedor de divisas en el mercado”.
“Las ventas oficiales suplieron la insuficiencia de la oferta genuina, atendiendo los pedidos de compra autorizados”, agregó el especialista.
Para Quintana, la actividad oficial también se concentró en los plazos más cortos de los mercados de futuros “con ventas que intentaron dar cobertura a la demanda de divisas”.
En tanto, el ministro Matías Guzmán en una entrevista al diario El País sostuvo sobre el aumento del dólar paralelo que “Argentina sigue en una situación de inestabilidad. El cambio oficial va a ir moviéndose con la inflación. Bajo condiciones de estabilidad macroeconómica se generaría estabilidad también en los mercados cambiarios alternativos”.
Tendencias mixtas
Con respecto a las acciones argentinas que cotizan en Wall Street mostraron tendencias opuestas. Las que más perdieron fueron las de Irsa Propiedades Comerciales (9,2%) y Cresud (5,6%). Las que más ganaron fueron las de Transportadora de Gas del Sur (8,6%) y Pampa Energía (7,7%). Este miércoles, los papeles locales retrocedieron hasta un 11%, en una jornada con aversión global al riesgo y en la que la calificadora MSCI retiró a dos bancos argentinos de sus índices.
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