Por Celeste Vázquez / para La Izquierda Diario
La fiscal general Gabriela Boquín denunció una nueva irregularidad en la causa judicial por la deuda millonaria que mantiene el clan Macri, desde hace 18 años, con el Estado por Correo Argentino S.A.
En este caso, la nueva irregularidad detectada por Boquin consiste en que desde el Correo se realizaron pagos por casi $35 millones a consultoras y estudios jurídicos, entre las cuales se encuentra el Estudio Tonelli, perteneciente a la familia de Pablo Tonelli, diputado nacional de Cambiemos integrante del Consejo de la Magistratura.
La fiscalía a cargo de Boquín elaboró un dictamen en el que las irregularidades detectadas saltaron a la luz a partir del estudio de los propios libros contables del Correo Argentino. En el texto se afirma que “en la administración de la concursada existieron pérdidas de activos líquidos inexplicables y sin justificación apropiada considerando que desde el 19/11/2003 ésta no registra actividad” y se califica de “vaciamiento progresivo” la actividad de los Macri.
El estudio de Tonelli recibió $4 millones en concepto de honorarios profesionales por los servicios prestados en el concurso de acreedores de Correo Argentino.
Un verdadero escándalo si tenemos en cuenta que Pablo Tonelli fue quien más defendió a rajatabla la propuesta presentada y avalada por el propio Mauricio Macri que implicaba una quita, una casi condonación, del 98 % de la deuda, y que fue rechazada por la fiscal Boquín. Esta quita, presentada en 2016, implicaba perdonarle al clan Macri más de 70.000 millones de pesos.
Hay un estudio que tuvo un poco “más de suerte” que los Tonelli y recibió más dinero aún. Se trata del Estudio Kleidermacher que se embolsó más de $9 millones. Uno de sus socios, Jaime Kleidermacher, es un es un histórico abogado del clan Macri y es quien se opuso a los peritajes ordenados por la fiscal Boquin.
También recibieron dinero las siguientes firmas: Romero Zapiola & Clusellas (integrada por Pablo Clusellas, secretario de Legal y Técnico); Estudio Cibilis & Castro Cranwell (pertenecientes a Jaime Cibilis Robirosa y Sebastián Castro Cranwell, integrantes del grupos Socma y Correo Argentino).
Luego del rechazo a la burda oferta del 2016, durante el año pasado, el grupo Macri volvió a presentar otra propuesta que era un mamaracho.
El clan Macri fue uno de los grupos empresariales que durante los noventa se benefició con las privatizaciones impulsadas por Carlos Menem. Uno de los grandes curros de los últimos años que llenaron los bolsillos de empresarios y funcionarios corruptos de los distintos gobiernos de turno, incluido el kirchnerismo. Curro que convirtió a los servicios públicos en verdaderos negocios, en detrimento de los intereses de la población, y que además todavía sigue en pié.
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