Miguel Passarini
El cuerpo real como espacio de resistencia y recuerdo. La evocación de lo vivido escrita en ese cuerpo aparece, irrumpe en una obra de danza-teatro, si es necesario aún ponerle rótulos a las expresiones escénicas contemporáneas, muy dispuestas a dejarse impregnar por otros recursos o lenguajes.
En Pieles. Relatos de un territorio, material que se conocerá este viernes vía streaming en su versión audiovisual, dado que no se trata simplemente de un rodaje de una función de la obra, a la performance escénica que le dio origen, se le suman otros elementos o dispositivos vinculados esencialmente con la imagen y la música, que la intervienen, y tejen una trama escénica que va de lo poético a lo político.
“Desmontan tu cuerpo y el de la tierra. Te amoldan y arrasan. ¿Cuántos pelos arrancados de raíz? ¿Cuántos brotes naciendo del cemento? La resistencia más antigua, la imparable vida. ¿Quién decide? ¿Quién siembra?”, plantea el proyecto a modo de manifiesto, surgido de una propuesta de creación de la bailarina Natalia Benedetto, quien se define como “bailarina y docente de danzas folclóricas y expresión corporal, guardiana del territorio, viverista de árboles nativos y defensora de la vida”. El trabajo contó con la dirección de Severo Callaci, con música y grabación sonora de Martín Reinoso, investigación visual de video y fotografía de Matías Sarlo, producción de Evangelina Jakas y dirección de fotografía y cámara de Marcos Garfagnoli. A este equipo se suma el vestuario de Florencia Marting, Ignacio Callusso como iluminista, la cámara de Juan Macielo, asistencia de cámara de Gonzalo Serra y edición y posproducción de color de Marcos Garfagnoli, además de algunos invitados e invitadas.
“El territorio cuerpo, nuestra primera casa y el territorio naturaleza en ese vínculo inseparable que nos da vida o muerte. Dialogan en esta obra la danza, la poesía, la fotografía y la música creando paisajes poéticos. La danza transcurre como metáfora de la palabra que nos remonta a las vivencias del desmonte, el desarraigo, los agrotóxicos, de las quemas, de lo que queda vivo del monte, del río”, plantea el profuso equipo de trabajo en un texto que acompaña la presentación de la obra y que establece algunas coordenadas en relación con los diálogos que el material entabla con su presente y con su entorno, en un lugar de producción que juntó a estos artistas en la localidad de Lucio V. López.
“Somos un grupo de artistas que nos vinimos a vivir a Lucio, construimos nuestras casas y armamos una pequeña comunidad de trabajadores artistas; vivir cerca de Rosario pero en una localidad de 400 habitantes nos permite hacer muchas cosas en un lugar donde hay mucho por hacer, crear y contar; en ese sentido surge este trabajo en la primera etapa de la pandemia”, expresó la productora Evangelina Jakas, también bailarina e integrante del grupo Mudanceras.
“Pieles es una obra que cuenta el proceso de descascaramiento de los territorios. La bailarina-actriz va transitando por distintos estados en los que siente su cuerpo desollado, como la piel vegetal del mundo lo está siendo, dejando al descubierto las cíclicas muertes por las que los seres transitamos. Así como el árbol se deshoja cada otoño perdiendo su color, los seres nos dejamos morir para volver a nacer en un nuevo ser, una y otra vez. A veces, los procesos se dan por la naturaleza misma de la vida, otras veces son arrancados de cuajo y nos toca volver a brotar en condiciones extremas”, adelantan.
“El trabajo nace primero como una danza escrita en tiempos donde necesité bajarme del escenario. Por cuestiones personales, la vida me llevó a detenerme y a estar más hacia adentro, y nacieron en mí estos textos, que algunos están en la obra y otros quedaron por fuera, pero todos juntos están hablando de estas pieles que nos descascaramos los seres, ya sea de modo natural o de un modo abrupto; de estas muertes y estos nacimientos como ciclos constantes de la vida, a veces naturales y necesarios y otras veces arrancados por el mundo mismo, por el modo de vida que elegimos, por el sistema, por lo que elegimos los seres humanos en estos tiempos”, adelantó a El Ciudadano Natalia Benedetto.
“Ese proceso arrancó hacia adentro, en silencio, fueron tiempos de escritura, y en febrero de 2020, los textos pidieron ser danzados. Decido asistir a un taller-retiro con Sergio Mercurio (destacado maestro conocido como El Titiritero de Banfield), que ofrece un proceso para creación, y allí fui con los textos y volví con una escena de danza de 20 minutos que dio origen a lo que hoy es Pieles; en ese proceso de regreso a Lucio V. López donde vivo, en la sala de ensayo donde trabajo, fueron apareciendo como una necesidad las imágenes que acompañan la escena que son todo un trabajo que hizo un compañero fotógrafo, Matías Sarlo, que también vive en Lucio V. López, y que además es un artista que viene trabajando toda una producción visual vinculada con la ruralidad y los territorios y que produjo las imágenes de la obra”, expresó Benedetto.
Y destacó: “En ese punto empieza el desarrollo de un diálogo entre el cuerpo y las imágenes de Matías, que abrió su archivo más allá de las imágenes y registros que salimos a buscar, y así empieza el vínculo entre textos, danza e imágenes. También allí apareció la necesidad de la presencia de un paisaje sonoro que acompañe y vincule, y así lo invitamos a Martin Reinoso, músico y compositor que también vive en Lucio V. López, quien luego de ver lo que teníamos montado hasta ese momento también inicia un proceso de búsqueda de sonidos, de salir a grabar e investigar y a caminar juntos el territorio. Así compuso las piezas musicales que acompañan cada escena, donde además de voces, hay quena, violín y guitarra. Y finalmente se suma en la dirección Severo Callaci con quien terminamos de dar forma y contenido a este trabajo que es pura investigación desde todos los lenguajes involucrados”.
Para cerrar, Benedetto expresó: “La apuesta está atravesada por un sentido crítico acerca de cómo habitamos los territorios los seres humanos; y lo que estrenamos este viernes, debido a lo extensa de la pandemia y las restricciones, es una versión online que fue creada especialmente, con un concepto propio, adaptada a estos lenguajes para abordar una obra con la que invitamos a que la gente, de algún modo, juegue a ir al teatro quedándose en su casa, que se siente y disponga todos sus sentidos para escuchar, sentir, percibir, imaginar y ver el viaje al que la obra invita”.
Para agendar
Pieles. Relatos de un territorio se podrá ver este viernes, a las 20.30. Las entradas se pueden adquirir a través de +54 9341-3152902 https://wa.link/2billr
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