El informe mensual del Centro de Estudios Scalabrini Ortiz (Ceso), expuso que el consumo masivo en Santa Fe continúa en retroceso. Las ventas en supermercados, patentamiento de 0km y el consumo eléctrico mostraron en mayo una caída interanual que se mantuvo desde el comienzo de 2019. A pesar del anuncio de Precios Esenciales, congelamiento de tarifas y el lanzamiento de Créditos Ansés, el gobierno nacional no logró reactivar la demanda en sectores clave.
En venta de autos 0km, mayo registró la peor caída en los últimos 12 años para la provincia de Santa Fe. Se vendieron 3.326 unidades, un 53% menos que el mismo mes del año anterior. Se espera un repunte puntual y excepcional en el mes de junio consecuencia del Plan Auto implementado por el Gobierno tras las continuas caídas en las ventas de OKM.
El rubro supermercados también continúa con números negativos. En abril (último registro) se produjo el octavo mes consecutivo de caídas reales superiores al 10% en ventas en supermercados santafesinos. “Electrónicos y artículos para el hogar” es el rubro más golpeado. Junto con el consumo eléctrico, la caída en este indicador alarma por su inflexible comportamiento a la baja.
Según la Asociación de Distribuidores de Energía Eléctrica de la República Argentina (Adeera), en mayo de 2019 la demanda de energía eléctrica en la provincia de Santa Fe fue de 996.136 megavatios hora (MWh), 2,3% inferior al mismo mes del año anterior. La caída muestra una desaceleración en los últimos meses, aunque mantiene una tendencia negativa.
En tanto, la utilización de tarjetas de crédito, principal modo de financiamiento del consumo, continúa cayendo en un contexto de aumento de tasa de interés y fuerte pérdida de poder adquisitivo de los ingresos. La caída en el uso de tarjetas de crédito, se suma a la de créditos prendarios y préstamos personales, que se encuentran en niveles bajos desde principios de 2018.
Tras ocho meses de caída consecutiva, en mayo el consumo de cemento presentó un aumento interanual traccionado por la obra pública en lo que parece ser de los pocos datos positivos para el consumo masivo. En mayo la demanda de cemento en Santa Fe creció un 8% respecto al mismo mes del año 2018. Este crecimiento se debió al aumento del consumo a granel utilizado principalmente para obra pública y grandes obras, mientras que el consumo de cemento en bolsa utilizado en las pequeñas obras cayó 4%.
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