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El camino de la fuga lo dejó esta vez en una celda

Iván Saboldi, de 22 años, cayó este sábado 31 tras una persecución sobre el auto que acababa de robar a mano armada, en una huida que continuó a pie en zona sur. Cuando lo identificaron vieron que estaba prófugo por haber protagonizado otro escape a fines de 2015, en el que murieron dos chicas

La última fuga. Iván Saboldi, de 22 años, quedó imputado este martes 3 por «robo calificado por el uso de arma de fuego apta para el disparo, atentado calificado contra la autoridad, violación de domicilio, y portación ilegítima de arma de fuego», luego de que, según relataron las fiscales Juliana González y Mariana Prunotto, le sustrajera a una mujer las llaves de su auto para llevarse el vehículo, con el que además eludió una persecución policial que continuó a pie y con disparos contra los uniformados que lo seguían. Cuando al fin fue capturado e identificado, surgió que hacía más de tres años que estaba prófugo: era el conductor de un auto que el 26 de diciembre de 2015, poco después del amanecer de ese sábado que continuaba a la Navidad, se había estrellado contra un portón de Rouillón al 2800, causándose a sí mismo graves lesiones y provocando la muerte de dos chicas: Carolina Evelyn Jalin, de 23 años, quien falleció en el acto, y Brisa Ayelén Ledesma, de 17, quien murió al día siguiente. En el auto había seis ocupantes –los otros tres fueron internados con lesiones graves– y pese a que circulaba en esas condiciones Saboldi intentó una evasión de alta velocidad, en la que condujo a 113 kilómetros por hora por avenida Presidente Perón de contramano: por ese comportamiento, siete meses después había sido imputado no por un grave siniestro vial sino por resistencia a la autoridad y homicidio. Ahora, según la Fiscalía, en la misma audiencia se le “reimputó” ambos delitos.

Iván, domiciliado en Villa Gobernador Gálvez, estaba en Gaboto al 100 bis de Rosario cuando, alrededor de las 20.30 de este sábado 31 de agosto, asaltó a una mujer de 38 años que había terminado sus tareas laborales, quitándole las llaves de su Fiat Palio, estacionado en el cordón de la vereda. Según la información judicial y policial desde un móvil que estaba patrullando la zona vieron la escena e intentaron cortarle el paso cuando se llevaba el auto sustraído. Saboldi eludió la encerrona y escapó, tras lo cual se inició una persecución hasta que a unas 12 cuadras del lugar, en Lola Mora y avenida Grandoli, frenó y escapó a pie, cubriendo su huida a balazos.

Según se expuso en la audiencia, el joven disparó al menos cinco veces contra el personal policial que lo seguía, y logró meterse a una casa a unos cien metros. “Finalmente el imputado fue detenido en calle Wernicke al 4600, en el interior de un domicilio sin el consentimiento de su morador, secuestrándose un arma de fuego 9 milímetros con 8 proyectiles y 1 en recámara junto con una bolsa de nylon con 6 municiones más”, relata la información del Ministerio Público de la Acusación.

Este martes a las 10, en la Oficina de Gestión Judicial del Centro de Justicia Penal, arrancó la  audiencia imputativa por el asalto –Saboldi quedó acusado por el robo calificado, por haber disparado a policías, por haberse metido por la fuerza en una casa y por portación de arma de guerra «todo ello en concurso real y en calidad de autor”– y concluyó con los cargos que ya le habían formulado cuando tenía 19 años, el 27 de junio de 2016, cuando llegó a la audiencia de entonces en silla de ruedas –el 26 de diciembre de 2015 se había fracturado las piernas– y quedó acusado de homicidio con dolo eventual, con una potencial pena de entre 8 y 25 años de prisión.

En la audiencia recordaron que la persecución se inició en Solís y Biedma (que a esa altura se llama Juan XXIII) por una mala maniobra de Saboldi, a quien un móvil policial le hizo señas de luces para que se detuviera. En lugar de hacerlo escapó por “calle Biedma en contramano, luego tomó dirección norte por calle Rouillón a una velocidad no inferior de 113 kilómetros por hora, luego atraviesa avenida Presidente Perón circulando en contramano un tramo de 90 metros, colisionando finalmente contra un portón”, según el racconto oficial.

“Por este hecho, cuando fue imputado se le dictó la libertad como alternativa a la prisión preventiva y debido a nueva evidencia, la Fiscalía lo notifico en varias oportunidades para tomarle imputativa en libertad. Ante la no presencia del imputado, en fecha 27 de noviembre de 2018 en audiencia se lo declaro en rebeldía”, recordaron las fiscales.

Ahora el Juez de primera instancia Rafael Coria le dictó prisión preventiva efectiva.

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