El fiscal Matías Edery, a cargo de la Unidad de Gravedad Institucional junto con su par Luis Schiappa Pietra, brindó precisiones sobre la pista que reactivó la causa del doble crimen de Luis Medina y su pareja Justina Pérez Castelli. Esta nueva “hipótesis de trabajo” tiene en la mira a Esteban Alvarado, hoy preso por el asesinato del prestamista Lucio Maldonado, cuya investigación echó luz sobre una organización criminal y sus “manejes” y dinámicas a la hora de planear crímenes, dijo el fiscal en declaraciones radiales. A más de un lustro de la de ejecución del empresario vinculado con el hampa, Edery dijo que el asesinato “hubiera sido imposible hacerlo sin cobertura policial”, aunque declinó abundar al respecto.
“Hay que aclarar que no hay relación entre el homicidio de Lucio Maldonado y Luis Medina. Sí en la causa y en la investigación sobre Esteban Alvarado, que se disparó sobre un grupo de personas que trabajaría en una organización criminal con él, vimos que muchos testigos que venían a declarar refieren al crimen de Medina y a esas circunstancias. Y desarrollan detalles sobre el hecho que son muy particulares y que, entiendo, no habían salido a luz, y por supuesto ahora son materia de investigación. Algunos detalles que nos permiten tener la necesidad de volver a ver la causa (del doble crimen) con esta nueva información que tenemos”, precisó el fiscal Edery en diálogo con LT8.
A la Unidad de Gravedad Institucional aún no ha llegado materialmente el legajo del juez de instrucción que investigó la causa Medina, pero Edery y Schiappa Pietra esperan atar esos cabos con la nueva información que obtuvieron durante la investigación del crimen del prestamista Maldonado.
El crimen de Medina y de su entonces pareja, conocida como Justine Fuster, fue perpetrado el 29 de diciembre de 2013 en Ayolas y Circunvalación. A más de un lustro, Edery explicó que los nuevos testimonios dan cuenta como fue la secuencia de los hechos: “Todos son coincidentes. Sacan de la escena una moto, dicen que son vehículos y que no existió resistencia por parte de las víctimas”. El asesinato, en palabras del fiscal, “hubiera sido imposible hacerlo sin cobertura policial; pero de qué lugar vino no lo podemos responder hoy, ni tampoco sé si la vamos a poder responder”.
“La investigación permite tener que hubo un grupo de gente que era compartido entre Alvarado y Medina quienes fueron socios y que tuvieron un problema de negocios: hablamos de negocios ilícitos. Esto es lo que refieren testigos que no son presenciales, si no que cuentan lo que conocieron en ese momento por ser del entorno de ambas personas”, dijo el investigador sobre la relación entre Medina y Alvarado, ambos señalados como actores relevantes del mundo del hampa local.
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