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Que no se note tanto

Efecto Tincho: dos jóvenes presos por 90 días bajo acusación de pegar dos piñas

El fiscal imputó a los muchachos por pegarle a Tiziano Gravier en Brown y Vera Mujica. En un caso inédito le atribuyó el delito de lesiones graves dolosas, "mediando acto discriminatorio por la condición social, posición económica o carácter físico". Y no discriminación al revés, como tituló Clarín


Dos jóvenes, de 26 y 27 años, fueron acusados como autores de los golpes que sufrió Tiziano, el hijo de Valeria Mazza y Javier Gravier, el domingo pasado por la madrugada frente a un boliche de Brown y Vera Mujica, en Pichincha. El fiscal Rodrigo Santana los imputó como autores de lesiones dolosas graves debido a que el ataque le provocó a la víctima, de 20 años, una fractura en la mandíbula que implicó una operación en el Hospital Universitario Austral y tiene un plazo estimado de recuperación de 90 a 120 días. El fiscal incluyó en su acusación una inédita apreciación que no había sido utilizada antes: “que fue mediando un acto discriminatorio por la condición social, posición económica o carácter físico” referida a que antes de pegarle, uno de los atacantes le dijo “Tincho”, expresión despectiva para referirse a una persona de clase alta. El juez Hernán Postma dio lugar a la imputación, aceptó la constitución de querellante solicitada por la familia de la víctima y dispuso la prisión preventiva efectiva por el plazo de 90 días para la dupla.

El ataque a Tiziano se cometió el domingo alrededor de las 5 cuando junto a su hermano menor fueron a la salida del boliche de Brown y Vera Mujica para reunirse con dos amigas. Los jóvenes se encontraron con las chicas y cuando se estaban yendo se cruzaron con otros dos muchachos, quienes le dijeron a Tiziano “Tincho”, luego le propinaron dos trompadas que le produjeron la fractura de la mandíbula y su desplazamiento.

Los hermanos Gravier llamaron a sus padres que estaban en la ciudad y fueron a buscarlos. Lo trasladaron hasta el sanatorio Británico donde estuvo internado y luego fue trasladado al sanatorio Austral donde este miércoles fue operado.

En las horas posteriores, el ataque trascendió a los medios nacionales no sólo por lo violento sino también porque la secuencia quedó registrada en una filmación de una cámara de seguridad y se observó que personal de Control Urbano estaba en el lugar en un móvil con las balizas prendidas. Lo más grave fue que no intervinieron. Según contó el secretario de Gobierno municipal Gustavo Signago, los agentes asistieron a un llamado por ruidos molestos y hay una investigación abierta para dilucidar lo que pasó, aunque no trascendieron los nombres y avances en este punto.

La investigación por el ataque quedó a cargo del fiscal Rodrigo Santana, quien ordenó medidas como el secuestro filmaciones de las cámaras de seguridad públicas y privadas de la zona como también del boliche.

En tiempo récord, hubo identificación de los dos jóvenes que golpearon a Tiziano y el miércoles por la mañana hubo dos allanamientos en la cuadra de Calvo al 1500, en la localidad de Funes y en Roldán. Pasado el mediodía, Jesuan M., de 26 años, y Franco Z., de 27, se presentaron en la oficina de la Fiscalía del Centro de Justicia Penal.

El abogado defensor Jorge Bedouret habló ante los medios locales tras la detención de sus representados y sostuvo que estaban arrepentidos. “Lo importante es que Tiziano está bien, que los chicos aprendan a comportarse de manera determinada y gracias a Dios no ha pasado nada demasiado grave. Son buenas personas que no tienen antecedentes penales, gente de trabajo en blanco, con pareja y una vida estable”.

La dupla quedó detenida e incomunicada hasta este viernes a las 14 cuando fueron imputados por el fiscal Santana, el cual describió que los acusados provocaron a Tiziano “llamándolo Tincho, evidenciando con ello una actitud discriminatoria fundada en la posición económica, condición social y caracteres físicos de la víctima”.

También calificó la golpiza como artera, sorpresiva y violenta: primero pegó “Franco Z., con camina oscura, y luego Jesuan M., con una especie buzo blanco con mangas color azules u oscuras, habiendo quedado toda esta secuencia captada por cámaras de video vigilancia correspondientes al complejo que allí funciona como también por otras cámaras privadas, retirándose a la veloz carrera el agredido junto a su hermano y también los agresores presumiblemente en una camioneta en la cual habrían llegado al lugar”, describió en su acusación.

Además, el fiscal enumeró la lesiones para calificarlas de graves constatadas por la historia clínica del Sanatorio Británico que diagnosticó una “asimetría facial con edema a predominio de maxilar izquierdo con dificultad para la apertura bucal por dolor, desprendimiento de parte de la mucosa malar en encía inferior izquierda y parte anterior de encía derecha, fractura del maxilar inferior izquierdo, con existencia de trazo de dirección transversal, ligeramente oblicuo, signos de edemas de partes blandas perifracturarios asociados a burbujas de gas y edema en hemicara izquierda asociada a limitación de la apertura bucal y movimiento de músculos masticatorios limitados por el dolor”.

El funcionario del MPA sumó el resultado del examen del médico Forense del Poder Judicial Néstor Cabrejas que determinó “que dichas lesiones se corresponden con el mecanismo de golpearse o ser golpeado con o contra superficie firme y dura, invalidantes, estimando su recuperación de no mediar complicaciones, en un lapso de 90 a 120 días, como asimismo también que la inutilidad laboral o para realizar sus tareas habituales será mayor al mes”.

Tras escuchar a las partes, el magistrado Postma aceptó la acusación de la Fiscalía y en un caso también atípico por el delito atribuido dictó la prisión preventiva efectiva por el plazo de 90 días para los imputados.

“Que sea un basta” 

Este jueves por la noche, Tiziano fue dado de alta y Valeria Mazza dijo en declaraciones a la prensa porteña “siento más alivio desde que pasó la operación y al verlo a él mejorando hora a hora”.

“Fue una trompada a toda la sociedad, a todos los que somos padres, es algo que no puede pasar. No estoy enojada, no siento ganas de venganza, siento que no puede seguir pasando. Ya que le pasó a un hijo mío y tuvo repercusión, que lo usemos para que sea un ‘basta’. No puede ser que no podamos salir a la calle tranquilos, que nuestros hijos no puedan divertirse, así no vamos a ningún lado”, concluyó.

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