Se trata de una iniciativa del concejal Eduardo Toniolli que apunta a resguardar los derechos de las personas en situación de calle, creando dispositivos municipales de abordaje de la problemática. El proyecto fue acompañado con las firmas de las concejalas Alejandra Gómez Saenz y Norma López, y elaborado junto a organizaciones de la sociedad civil que trabajan en la problemática.
“Las causas de que hoy haya gente durmiendo en la calle son muchas (la situación económica, las migraciones, los problemas vinculares, familiares, de salud, y hasta institucionales) pero la solución es unívoca: hace falta más voluntad del Estado para cuidar a las personas” sostuvo Toniolli al momento de presentar públicamente el proyecto, y apuntó: “más allá de políticas macro que no están a su alcance -y que a veces se utilizan como excusa para no actuar- la Municipalidad debe involucrarse activamente, y no sólo valerse del esfuerzo y compromiso de organizaciones comunitarias, voluntariados e iglesias, que trabajan en la materia”.
En ese sentido, el edil justicialista explicó que el proyecto de ordenanza quiere “dotar al Municipio de un área específica, con presupuesto propio, que cuente con herramientas de monitoreo y acompañamiento para los rosarinos y rosarinas que estén en situación de calle, o en riesgo de estarlo”.
“Es necesario que existan centros de integración abiertos las 24 horas del día, los 365 días del año, con espacios de integración, formación y esparcimiento, espacios que hoy Rosario no tiene” señaló el concejal, y subrayó: “para muchas personas la calle no es solo el lugar donde se duerme, sino un escenario de vivencia y supervivencia, y ese continuo proceso de desposesión material y simbólica sólo se frena con un Estado presente, que acompañe y proteja a quien lo necesita”.
La iniciativa presentada propone que la nueva área municipal impulse acciones positivas y promueva políticas transversales a toda administración pública local, que garanticen para las personas en situación de calle el derecho a la dignidad personal e integridad física; a la identidad personal; al acceso y al uso de los servicios, de la infraestructura y de los espacios públicos; al acceso pleno a los servicios socio asistenciales, de salud y de apoyo para la obtención de un trabajo digno; y al acceso a una vivienda digna.
Asimismo, el proyecto de Ordenanza dispone la realización de una relevamiento anual, la creación de una comisión de monitoreo integrada por las organizaciones comunitarias que trabajan la problemática, y la obligación de formación permanente en el tema para el personal municipal de las áreas de desarrollo social y de los organismos de control.
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