Para los vecinos de Parque Casas, la cuadra de Esquivel al 1300 se transformó este jueves por la tarde en zona de guerra en referencia a las dos balaceras que dejaron un herido de bala que terminó internado en el Heca y otra persona que sufrió un tiro en un tobillo. Todo ocurrió después de las 18 y por lo bajo sobrevoló que el blanco del ataque era un joven apodado Nono, quien sería familiar del fallecido Emanuel “Ema Pimpi” Sandoval, ejecutado junto a otros dos amigos en una casona de barrio La Florida en octubre pasado.
De acuerdo con fuentes policiales, en plena tarde de este jueves desde una Ford Ecosport bordó partió una ráfaga de tiros sobre una vivienda de pasillo ubicada en Esquivel al 1300, casi esquina Washington. Allí, contaron vecinos, estaba un tal Nono junto con su novia, quienes resultaron ilesos de ese ataque. Nono, dijeron por lo bajo vecinos y las fuentes oficiales no lo confirmaron, sería uno de los hermanos de Ema Pimpi, asesinado durante la madrugada del 25 de octubre dentro de la casona de Pago Largo 654 donde cumplía prisión domiciliaria y había montado un estudio de grabación, en una oscura emboscada que también le costó la vida a sus amigos Mirco Saldaño y Rocío Genovese.
“Al Nono quisieron matarlo desde la Ecosport y se defendió a los tiros”, dijo un vecino, abonando la versión de enfrentamiento, lo que no fue confirmado por la Policía.
Réplica
Pero minutos después las detonaciones arreciaron otra vez. Ahora, según explicaron vecinos a la prensa, los plomos partieron desde una moto tipo Honda Tornado que pasó por Washington disparando a lo loco contra personas que se habían salido de sus casas para enterarse de las secuelas del ataque anterior.
Producto de esta réplica de blanco difuso, dos jóvenes resultaron lesionados. Uno de ellos, indicaron las fuentes judiciales y policiales, fue identificado como Diego Osvaldo M., de 24 años, quien vive a metros del pasillo atacado. El joven recibió un tiro debajo de una axila, y de inmediato un allegado lo trasladó en moto al hospital Alberdi. Desde allí lo llevaron al hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca), donde lo estabilizaron. También en la misma secuencia un proyectil alcanzó el tobillo de Maximiliano M., de 26 y con domicilio en Parque Casas.
Un vecino contó que quienes dispararon desde la Honda Tornado “eran rapados y tenían aritos de oro. Tuvimos que hacer cuerpo a tierra, había sacado a mi hija a tomar un helado. Esto es zona de guerra”, graficó el joven padre en declaraciones a Telefé Rosario.
Los primeros policías en llegar fueron los uniformados de la comisaría 10ª que estaban cumpliendo una diligencia en Washington al 2100 y procedieron a resguardar la escena; de allí juntaron vainas servidas y tomaron las primeras entrevistas de donde surgieron posibles nombres de los atacantes, señaló una fuente policial.
El esclarecimiento del hecho quedó a cargo de la Fiscalía de Flagrancia en turno y ordenaron medidas al personal de la Agencia de Inteligencia Criminal para el levantamiento de rastros, toma de testimonios, pericia fotográfica y relevamiento de cámaras de la zona, dijeron desde el Ministerio Público de la Acusación.
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