Lisandro Olearo
Duendes se consagró campeón invicto y con el ingoal en cero de la 30ª edición del Seven de Tandil que lleva el nombre de Fernando Varela. El certamen de juego reducido es organizado por el club Los 50. Con un equipo conformado por jugadores jóvenes, el Verdinegro ganó el torneo por segunda vez en su historia, pues ya lo había hecho en 2001. Joaquín Brogliatti fue elegido como mejor jugador del torneo y Matías Cáceres se erigió como el tryman del certamen con nueve conquistas.
La participación de Duendes en Tandil tiene una explicación. Más allá que el club de Las Delicias pocas veces declina una invitación para participar de un torneo de Seven, Carlos Araujo (hijo) explicó las razones de por qué el Verdinegro se hizo presente en el torneo de juego reducido en la localidad bonaerense. “En 2001 fue a jugar un equipo de Duendes que tenía a Pablo Gulino como capitán, salieron campeones y se ganaron un auto. Y este año se festejaban los 30 años del torneo en Tandil, nos invitaron y fuimos”, expresó Araujo, el jugador más experimentado del plantel.
En cuanto a la preparación, el medio scrum dijo: “La base del equipo es la que jugó torneos en Corrientes, Hindú y GER. Nos juntamos a entrenar la semana pasada, fueron tres entrenamientos, pero nos conocíamos del año pasado. Nos faltaba un jugador y se sumó Guido Chesini que es M19, él fue el más chico y yo el más grande del plantel”.
Además de su hermano Juan Ignacio, su primo Santiago tuvo una importante participación. “Santiago Araujo está lesionado, no podía jugar y fue el entrenador. Es que Maxi Nannini y Nicolás Gatarello, que habían sido los entrenadores durante los Sevens en 2018, no podían viajar, y ahí Bubi tomó la posta. Él fue el encargado de armar el sistema de juego”, dijo Carlos, hijo del ex presidente de la Unión Argentina.
Por último, Carlos reveló el secreto del éxito de Duendes en el Seven de Tandil. “Jero le tiró unas directivas al Bubi (apodo de Santiago Araujo) y fue el secreto del éxito, que todos jugaran la misma cantidad de minutos para poder llegar a la final todos frescos. Teníamos línea directa con el capitán de Jaguares (risas)”, fue la confesión de Carlos. “Le di un par de consejos a Bubi. Los aplicaron pero juegan bien al rugby, por eso les fue bien en Tandil”, expresó desde el búnker de Jaguares Jerónimo de la Fuente. Confirmando el origen del secreto verdinegro para el éxito en Tandil.
El plantel estuvo integrado por: Andrés Villoslada, Juan Ignacio Araujo, Matías Cáceres, Francisco Pérez, Martín Pellegrino, Julián Denhoff, Giuliano Bufarini (c), Joaquín Brogliatti, Tomás Herrera, Felipe Roldán, Guido Chesini y Carlos Araujo (jugadores); Santiago Araujo (entrenador) y Emiliano Narvaja (mánager).
El camino de Duendes comenzó el sábado con los triunfos sobre Limitación 7 (equipo integrado por jugadores tandilenses) por 29 a 0 y Choiques 7-0 (equipo compuesto por jugadores del seleccionado universitario argentino, que se prepara para el Mundial Universitario en La Plata a jugarse este año).
En tanto, el domingo se disputaron los partidos rumbo al título. En el primer partido ante Mercedes, los rosarinos se llevaron la victoria ya que el equipo de Villa Mercedes (con mayoría de rugbiers que juegan en Cuba) no se presentaron. En semifinales, Duendes superó a La Musso (equipo con jugadores de clubes de Luján) por 19 a 0. En la definición, el Verdinegro goleó al seleccionado de Seven de Entre Ríos por 36 a 0.
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