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Gatillo Fácil

Dos uniformados del Comando Radioeléctrico irán a juicio por un doble homicidio

Intervinieron en un presunto intento de robo y uno de los empleados policiales fue acusado de matar a las víctimas por la espalda. El otro de incumplir sus deberes y de encubrir. La doble ejecución quedó resgistrada en las cámaras de seguridad de las inmediaciones de Buenos Aires y 27 de Febrero


Dos policías que en 2019 prestaban servicio en el Comando Radioeléctrico y protagonizaron un hecho que terminó con el doble crimen de una pareja en el marco de operativo sobre un presunto intento de robo irán a juicio oral. Uno enfrenta cargos por falsedad ideológica, incumplimiento de los deberes de funcionario público y encubrimiento agravado mientras que el otro fue acusado de doble homicidio calificado por ser cometido en abuso de sus funciones como miembro integrante de una fuerza policial, agravado por el uso de arma de fuego y falsedad ideológica. Para el primero, la Fiscalía solicitó una pena de 3 años de cárcel más inhabilitación y multa mientras que para el otro la prisión perpetua.

El ataque fatal se originó pasadas las 22 del 21 de mayo de 2019 en la zona de Buenos Aires y bulevar 27 de Febrero, donde se encuentra la plaza del Che. Según la investigación, una chica caminaba por esa cuadra cuando fue abordada por un hombre, quien intentó robarle las pertenencias y comenzaron forcejear. En esas circunstancia, aparecieron los dos policías en un móvil y el ladrón corrió hacia una moto que lo esperaba en la esquina y era conducida por una muchacha.

Quedó grabado

Según los registros fílmicos que tomaron las cámaras de seguridad del lugar, los policías Hugo Daniel Leone y Luciano Noceli iban en el patrullero por 27 de Febrero en sentido este-oeste y doblaron hacia calle Buenos Aires en contramano.

En la secuencia, los investigadores a cargo del fiscal del caso Gastón Ávila vieron cómo un hombre, luego identificado como Maximiliano Rosasco, de 35 años, iba en dirección de una moto conducida por Jimena Daiana Gramajo, de 26, quien estaba parada en la esquina, antes de cruzar la senda peatonal.

Cuando Rosasco intentó subirse, la chica cayó de la moto. El hombre se paró y comenzó a correr mientras Gramajo quedó en el piso con parte de la moto sobre su pierna derecha. En la imagen apareció corriendo el oficial Hugo Daniel Leone y se vio cómo Rosasco corría y apuntaba con lo que parecía ser un arma de fuego, contó la acusación.

El oficial también apuntó y efectuó dos detonaciones pero tropezó y cayó al piso. Desde allí continuó disparando. Rosasco corrió hasta la vereda y cayó al piso, de acuerdo lo que describió la reseña de la filmación.

Gramajo que seguía en el piso y con parte de la moto encima se desmoronó y apareció en la escena el oficial Luciano Noceli que se acercó a Rosasco con el arma en mano y le efectuó, a una distancia de un metro, tres disparos, detalló la acusación.

Versión de los policías

Los uniformados brindaron su declaración que quedó plasmada en el acta de procedimiento. Contaron que vieron el forcejeo entre el ladrón y la víctima de robo. El hombre salió corriendo con un arma en la mano. Le dieron la voz de alto que no acató y al quedar a la altura del móvil disparó. El coche policial giró y se subió a la vereda de la plaza.

El policía Leone dijo que se bajó y siguió al ladrón a pie. En ese momento, Rosasco intentó subir a la moto y disparó contra el uniformado, quien dijo que repelió la agresión. Leone se cayó y el ladrón siguió apuntándolo y se produjo un nuevo intercambio de disparos en el que intervino Noceli que estaba varios metros atrás, aseguraron.

Las víctimas fueron trasladadas al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca), las operaron pero murieron a consecuencia de las heridas sufridas.

Ambos sufrieron un shock hipovolémico por lesión grave tóraco-abdominal. En el caso de la joven de 26 años, la pericia determinó que los dos proyectiles que la impactaron fueron en una trayectoria de atrás hacia delante de abajo hacia arriba y de derecha a izquierda. Uno de los peritos estimó la probabilidad de que uno de los disparos que alcanzó a Gramajo haya sucedido mientras la misma se encontraba sentada en la moto en la posición de manejo y que fue lo que motivó su caída lateral.

En cuanto a Rosasco, los resultados de las pericias determinaron que sufrió nueve orificios de entrada, dos de re entrada, seis de salida y uno de re salida además tenía cuatro plomos alojados en el cuerpo.

En la escena del doble crimen se encontraron 17 vainas servidas. Las pericias determinaron que 8 fueron disparadas por el arma de Leone, 9 por la reglamentaria de Noceli y una por el revólver calibre 32 de Rosasco. Además se constató que el daño que presentaba el parabrisas del móvil policial era sólo en la capa externa del vidrio y no se correspondía con la impronta de un impacto de bala.

Con estas pruebas, la Fiscalía acusó a los uniformados de balear a Gramajo al menos en dos oportunidades y dispararle a Rosasco entre 1 y 4 veces, provocar su caída y efectuarle tres disparos más.

Para la acusación, Noceli fue el autor material del doble homicidio. De los registros fílmicos surgió que primero le disparó a Gramajo cuando estaba sobre la moto con las dos manos en el manubrio sin ostentar ningún elemento de peligrosidad, inmóvil y de espaldas al uniformado. Los tiros le ingresaron por la espalda, remarcó la acusación.

En cuando a Rosasco, la Fiscalía estimó que le disparó cuando ya estaba herido en el piso producto de los balazos que le había efectuado Leone. El funcionario explicó que el arma de fuego que portaba la víctima tenía capacidad para disparar un solo proyectil y de hecho así lo hizo.

Luego de disparar en esa única oportunidad, Rosasco recibió cuatro disparos efectuados por Leone, acción que consideró justificada en el marco de un enfrentamiento pero Noceli, en lugar de concretar la detención, cuando Rosasco estaba tumbado en el suelo herido, boca abajo y no representaba una amenaza decidió ejecutarlo y le disparó cinco veces por la espalda, resumió el fiscal Ávila.

Preliminar

En la audiencia preliminar que tuvo lugar este lunes el fiscal acusó a Hugo Leone por los delitos de falsedad ideológica en calidad de coautor, incumplimiento de los deberes de funcionario público, y encubrimiento en razón de no haber denunciado un delito conocido cuando tiene la obligación de hacerlo, calificado por tratarse de un delito especialmente grave y por ser funcionario público. Adelantó que pedirá una pena de 3 años de prisión efectiva e inhabilitación absoluta por el término de 6 años que se suma a una multa de diez mil pesos.

A Luciano Noceli lo acusó de dos hechos de homicidio calificado por ser cometido en abuso de sus funciones como miembro integrante de una fuerza policial, agravado por el uso de arma de fuego y falsedad ideológica. Dijo que solicitará en juicio la pena de prisión perpetua e inhabilitación especial para el empleo como personal de las fuerzas de seguridad pública, policiales o penitenciarias por el término de 10 años.

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