Firmes en su postura. Los futbolistas, englobados en el gremio que encabeza Sergio Marchi, no dieron el brazo a torcer ante las presiones de los dirigentes y ratificaron el paro total, al menos hasta que se salde gran parte de la deuda que muchos de los clubes mantienen con sus jugadores.
Y entre tantas voces que se escucharon a lo largo de la caótica jornada de ayer, una de las que más se destacó fue la de Sebastián Domínguez, uno de los principales referentes que tiene Newell’s.
“Siento que los jugadores estamos más fuertes que nunca”, aseguró el experimentado zaguero en diálogo con radio Continental. Y enseguida agregó: “Estos problemas datan de hace seis meses. Hubo paciencia. Pero esta situación es un quiebre”.
La ratificación de la huelga por parte del gremio derivó en diferentes posturas entre las instituciones y en una fuerte presión de AFA, que amenazó con la quita de puntos para aquellos clubes que no se presenten a jugar las fechas correspondientes.
En consecuencia, Domínguez sostuvo que tratarán de ser “coherentes” para cancelar las grandes deudas y las “más lejanas”.
“La reunión de ayer (por el jueves) me pareció excelente, aunque sigo notando que hay mucho miedo entre los jugadores. Espero que esto marque un cambio para los próximos 50 años”, deseó el defensor.
Newell’s hizo diferentes protestas durante la pretemporada por los retrasos salariales y actualmente la deuda llegó a los cuatro meses.
“No pretendemos que el cambio sea rotundo, pero tampoco podemos seguir confiando en un sistema que falla hace muchos años. Hay que hacer algo. Y hay que hacerlo ya”, argumentó el ex futbolista de Vélez y Corinthians de Brasil, entre otros.
“Para nosotros es un no rotundo, desde el momento en que hay deudas de 3 a 4 meses”, destacó Domínguez, quien el jueves participó de la reunión de capitanes junto a Ignacio Scocco y Maxi Rodríguez, como los tres representantes de la Lepra.
Comentarios