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En primera persona

Dolor e indignación en el “puente de la muerte”, después de la masacre en Sacaba

"Algunas señoras portaban banderas blancas en señal de la paz, otros la wipala y otros la tricolor nacional quizás queriendo decir que ellos también son bolivianos. No veía infiltrados foráneos ni mucho menos (quizás yo era el más extraño)"


Era un puente. El puente Huayllani. A la entrada a Sacaba. A un lado, los policías y, al otro, los cocaleros. Yo estaba mimetizado entre los productores de coca.  Algunos me miraban con desconfianza, era previsible. Otros casi entendían porque estaba allí para reflejar aquello que los medios tradicionales no muestran. Me decían que no saque fotos, pero le hacía comprender y luego uno de ellos posó ante mí celular. No estaban armados con objetos letales, solo estaban precavidos con agua, vinagre para mitigar seguramente los efectos de los gases lacrimógenos ante una posible gasificación.

Algunas señoras portaban banderas blancas en señal de la paz, otros la wipala y otros la tricolor nacional quizás queriendo decir que ellos también son bolivianos. No veía infiltrados foráneos ni mucho menos (quizás yo era el más extraño). A uno le pregunté porque defiendes al Evo y me respondió: “porque nos dio dignidad”. Decían que vayan las mujeres a la cabeza de la marcha portando las banderas blancas en señal de pacificación. Estaban en una actitud pacífica. Varios estaban pijchando. Uno de ellos me convido algo de su hoja de coca.

Mientras tanto, como si fuera una ave de rapiña en busca de su carroña, un helicóptero sobrevolaba en #Sacaba en una actitud de amedrentamiento sobre los productores de hoja de coca apostados en un puente frente a los policías Era un presagio que se acercaba una represión. Al medio día escuché que se abrió una mesa de negociación con mediadores las cosas no iban a pasar a mayores. Además, en la víspera había más cocaleros en apronte y no pasó nada. Por eso decidí volver a Cochabamba. Me subí a un minibús. Cuando prendo el celular me entero que no solamente fueron gasificados por la policía, sino que habían usado armamento letal. O sea, dispararon a matar. Dicen que hay cinco muertos. La tristeza apodera mi alma.

#HurgandoElAvispero / Yuri F. Tórrez (periodista)

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