Movilización y furia. Gremios locales enrolados en el Movimiento Sindical Rosarino, la CTA y el moyanismo que estuvieron en la concentración del miércoles para rechazar las reformas laboral, jubilatoria e impositiva arremetieron ayer contra los senadores de la oposición que apenas horas después de la multitudinaria demostración frente al Congreso nacional, aprobaron el proyecto previsional del oficialismo.
“Esto de meterle las manos en los bolsillos a los jubilados que muchas veces no tienen ni para medicamentos merece una reacción de todos los hombres de buena voluntad que habitan este país”, fustigó el secretario General del Sindicato Municipal de Rosario, Antonio Ratner. “El problema es que no se tienen que olvidar los legisladores de para qué los votaron y quiénes los votaron”, continuó. “Lo mismo para los dirigentes sindicales: no olvidarse para qué los votaron sus compañeros. Los trabajadores municipales movilizamos porque creemos que estas reformas no les trae beneficios al trabajador, y sí a los que más tienen. Los trabajadores tenemos que estar en calle defendiendo lo nuestro”, sostuvo.
Para Matías Layús, integrante del secretariado nacional de La Bancaria, uno de los gremios que integran la combativa Corriente Federal de Trabajadores de la CGT, “el mensaje fue claro para los legisladores nacionales: que no vendan ni hipotequen el presente y futuro de los jubilados y los trabajadores”. “El gremialismo se está uniendo –advirtió Layús– y tenemos experiencias ejemplares como el Movimiento Sindical en Rosario, y el Movimiento Obrero Santafesino también en toda Santa Fe. Estas experiencias se están dando en todas las provincias”.
Por su parte, Marcelo Andrada, titular del Sindicato de Recolectores de Rosario advirtió: “Con esa plaza llena de trabajadores no vamos a permitir una reforma laboral que vaya en contra de todos los trabajadores. Todas las conquistas que hemos logrado los trabajadores las vamos a seguir peleando en la calle y donde sea. Nos juntamos trabajadores movimientos sociales y llamamos a todos los dirigente gremiales para estar juntos en una pelea contra quienes hacerle daño al pueblo trabajador argentino”.
Las quejas sindicales también hicieron blanco en la CGT, cuya mesa avaló a principios de semana la reforma laboral, aunque expuso su rechazo a la reforma previsional, precisamente lo que terminaron votando los senadores nacionales. “Estamos muy disconformes con la conducción de la CGT nacional y con los legisladores que han traicionado a los jubilados, a los trabajadores y a todo el pueblo argentino”, se enojó Claudia Indiviglia, secretaria general de Norte, uno de los gremios que –precisamente– representan a los trabajadores del Pami.
“La seccional Rosario de la UOM fue la primera en rechazar el paquete de medidas del gobierno nacional –dijo por su parte Daniel Gutiérrez, miembro del secretariado local de los metalúrgicos–. Y estaremos en la calle batallando para que no se aprueben leyes en contra de los derechos de los trabajadores. Estamos de acuerdo con medidas más contundentes si el gobierno insiste con estas reformas”.
Por su parte, René Gonzalez de la Asociación de Trabajadores de la Junta Nacional de Granos (APJNG), invirtió la ecuación en la mayor central obrera: “La CGT debe sumarse al nuevo espacio que se ha generado en la marcha, porque se ha marcado un camino. Es repudiable la actitud de legisladores que votaron la reforma previsional”, sostuvo.
Y Gustavo Méndez, secretario general del Sindicato del Seguro manifestó lo mismo: “La marcha fue enorme y el gobierno nacional ya debe ver algunos matices que tienen que ver con el ánimo social en general. Lo ideal es que la CGT se sume a este nuevo espacio para demostrar al presidente que no se está yendo por el carril que el pueblo trabajador quiere”. En tanto, sobre el accionar de legisladores del PJ en relación al voto de la reforma previsional, el dirigente gremial señalo que, “una marcha no cambia una ley pero los legisladores deben votar acorde a los intereses del pueblo”.
En tanto, en la CGT regional San Lorenzo, cuyos gremios también se movilizaron a Buenos Aires, celebraron “el espíritu de unidad y la disposición a la lucha manifestada” tanto en las columnas como en los discursos de los cuatro oradores, el docente Hugo Yasky, el estatal Pablo Micheli, el camionero Hugo Moyano y el bancario Sergio Palazzo. “Hemos dicho basta y con capacidad para resistir. Ahora demostraremos la capacidad de generar propuestas alternativas para confrontar al proyecto neoliberal del gobierno nacional”, insistió la regional.
En el Cordón Industrial, el secretario General del Soepu (Petroquímicos), Mauricio Brizuela, anticipó que habrá más batallas: “A partir de ahora quedó demostrado que se está armando un núcleo duro de resistencia a estas reformas, hubo en la plaza Congreso una gran convocatoria con discursos que estuvieron a la altura de la circunstancias y me quedó la satisfacción de que el movimiento obrero se está despertando ante este gobierno nacional que solo quiere avasallar los derechos de los trabajadores”, sostuvo. Y agregó un mensaje directo a los sindicatos que forman parte del entramado del oficialismo: “A los gremios que piensen que acordando con el gobierno van a poder gobernar a espaldas de las bases se equivocan, porque quedó demostrado que el grueso de la gente está en contra de las reformas”.
Rubén Pérez, secretario General del Sindicato de Petróleo, Gas y Biocombustible Santa Fe Sur evaluó como “muy buena” la movilización al Congreso, pero fue tajante con la cúpula cegetista y los senadores que votaron la reforma previsional: “Ya no se espera nada del triunvirato y de ciertos legisladores que votan a espaldas de la gente. Es esperable lo que han hecho”, lamentó. De igual modo sostuvo que “nació una verdadera esperanza” con la movilización, pese a que “lamentablemente muchos trabajadores votaron a este gobierno”.
Y Julio Barroso, secretario general del Sindicato Químico de San Lorenzo entendió que: “hubo una muestra contundente de los trabajadores y sus organizaciones, de rechazo a este ajuste laboral, previsional y ataque a sectores populares que día a día con su laburo hacen a la riqueza de este país”, que también fue un “mensaje claro” a los legisladores para que “no voten contra la población”.
