Bianca Ossola
Desde hace unos años, los 21 de agosto se conmemora el Día de la Futbolista Argentina. La fecha elegida tiene relación con el partido disputado por la selección argentina en 1971 ante Inglaterra en México.
Aquel día en el estadio Azteca, el combinado nacional goleaba 4-1 con una destacada jornada de Elba Selva, que anotó los cuatro. El partido era correspondiente a un Mundial, no oficial, claro. Recién en 1991 la Fifa organizó una Copa del Mundo para mujeres. Justamente, ese año fue el primero en el que la Asociación del Fútbol Argentino cuenta con un torneo “oficial”.
Aquella Copa del Mundo en México se jugó entre el 15 de agosto y el 5 de septiembre de 1971 y participaron seis selecciones. Argentina perdió 3-1 contra México en el debut, luego goleó 4-1 a Inglaterra y cayó en el tercer partido contra Dinamarca por 5-0. El partido por el tercer puesto también fue derrota y no hubo podio.
“El cuarto gol llegaría en la segunda etapa: Selva aprovechó una mala salida de la arquera y cerró el partido. La ovación fue una melodía afinada, gigante, como un coro inmenso que la aclamaba, y con el que todavía sueña cada tanto”. El relato corresponde al libro “¡Qué jugadora!” de Ayelén Pujol, quien reconstruyó aquel hito con las voces de las protagonistas.
A México viajaron un grupo de 17 futbolistas argentinas a disputar una Copa del Mundo, que sin saberlo, terminó marcando un antes y un después para la selección nacional y la historia del fútbol argentino.
Las futbolistas de ese plantel eran Elba Selva, Gloria “Betty” García, Marta Soler, Teresa Suárez, Angélica Cardozo, Blanca Bruccoli, Eva Lembessi, Virginia Andrada, María Fiorelli, María Ponce, Zulma Gómez, Ofelia Feito, Susana Lopreito, Marta Andrada, Virginia Cattaneo, Zunilda Troncoso y María Cáceres. Viajaron sin entrenador, sin auspiciantes, con poco dinero y ropa donada por Unión Tranviarios Automotor (UTA). Una vez en México, tuvieron que hacer todo tipo de actividades para recaudar dinero y así poder pagar su viaje de regreso y la estadía.
En 1913 se jugó en Rosario el primer partido de fútbol entre mujeres del que se tiene registro
Angélica Cardozo, la capitana de aquel equipo, recordó en diálogo con Página/12 hace algunos años: “Yo tenía 19 años y todo lo que pasaba lo veía como a través de un vidrio, nunca pensé que podía hacerse realidad. Viajamos un 11 de agosto, era el cumpleaños de Betty García y lo festejamos arriba del avión. Yo no podía creer lo que estábamos haciendo, mucho menos el recibimiento que tuvimos en México”.
Los libros de historia del fútbol no las nombraban, sus caras no eran camisetas, ni poster. Esas mujeres, que en la Copa del Mundo participaron junto a México, Italia, Francia, Inglaterra y Dinamarca, fueron parte de las “Pioneras”, esas primeras futbolistas argentinas que patearon una pelota. Las que se animaron a contar una historia que durante años estuvo tapada y dieron el puntapié inicial para construir el presente y el futuro del fútbol practicado por mujeres.
Comentarios