Mundo

México

Deudos de desaparecidos protestan por “trailer de la muerte”

Familiares de desaparecidos piden que se identifiquen los 273 cuerpos que el gobierno de México apiló en un camión ante el colapso de las morgues. Las autoridades mexicanas ofrecieron realizar pruebas de ADN


Foto: Gentileza Canal N

Agrupaciones que buscan a familiares desaparecidos en México llegaron a la ciudad de Guadalajara para protestar tras la escandalosa revelación de que el gobierno local apiñó en un camión a cientos de cadáveres sin identificar, víctimas de la creciente criminalidad, por falta de espacio para conservarlos.

Tratando de aplacar la indignación, autoridades ofrecieron esta semana pruebas de ADN que permitan a los familiares identificar a sus seres queridos entre los 273 cadáveres del “trailer de la muerte”, como fue nombrado por algunos medios locales.

Yadira González, integrante de un colectivo de familias de desaparecidos del estado de Querétaro, se enteró de la existencia del tráiler a través de redes sociales.

“Al conocer la lamentable noticia, dije: tenemos que estar presentes porque no sabemos nosotros en realidad en dónde está nuestra gente”, dijo a la AFP González, de 36 años, quien busca a su hermano Juan, desaparecido hace 12 años.

El camión frigorífico circuló la semana pasada por barrios empobrecidos de la segunda mayor ciudad mexicana, capital del estado de Jalisco, donde los responsables de su cuidado pretendieron estacionarlo, generando protestas de sus residentes debido al hedor, las moscas y el riesgo para la salud pública.

El escándalo provocó el despido del jefe del instituto forense y del fiscal estatal, mientras que el gobernador se disculpó públicamente y se comprometió a construir un espacio para los cuerpos, reconociendo además la saturación de las morgues de la ciudad.

González, junto a unas 100 personas con pancartas de todos los tamaños, en las que se muestran fotografías de sus familiares ausentes, se plantaron anteayer frente al Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses para demandar a las autoridades la localización de sus parientes.

El colectivo queretano trabaja con enlaces nacionales y otras organizaciones hermanas. “Incluso trabajamos en fosas clandestinas con Brigada Nacional de Búsqueda”, apuntó.

 

No hay resultados

 

En una clínica de ADN los familiares pueden completar un perfil genético con la esperanza de que los médicos forenses o los investigadores encuentren alguna coincidencia.

Juan Francisco Flores, que busca a su hijo, ya había pasado por el proceso varias veces. Juan Jr. desapareció en marzo de 2016 a los 16 años.

“Desgraciadamente todo esto ya lo hemos vivido varias veces y no ha habido resultados (…) Nos han tomado muestras de ADN aquí, en PGR, en muchas partes y pues no ha habido nada”, dijo Flores con la voz quebrada.

“¡Vivos se los llevaron, vivos los queremos!”, fue una de las consignas que se escuchó durante la protesta.

Guadalajara se ha llenado de cadáveres debido a la violencia desatada por el cártel Jalisco Nueva Generación, considerado por autoridades como el más poderoso de México.

Durante el fin de semana pasado se reveló que las morgues de la ciudad estaban tan llenas que las autoridades decidieron alquilar el macabro tráiler.

Funcionarios lo trasladaron finalmente a una instalación de almacenamiento de la Fiscalía en el centro de la ciudad.

La prensa mexicana divulgó imágenes del contenedor abierto con montones de bolsas negras con los cuerpos y un hombre con botas blancas, presumiblemente trabajador de la morgue, caminado sobre ellas.

“La sociedad ha perdido toda confianza en las instituciones gubernamentales y sus líderes”, dijo Guadalupe Aguilar, otra mujer que busca a un familiar desaparecido.

 

Ola de violencia

La ola de violencia generada por los narcotraficantes en México ha elevado a cerca de 36.000 el número de desaparecidos, según conteos oficiales. Las familias de los desaparecidos a menudo buscan infructuosamente durante meses o años.

El número de víctimas de asesinato en México se disparó desde que el gobierno desplegó a finales de 2006 una polémica ofensiva militar contra el narcotráfico. Desde entonces suman más de 200.000 muertos, según información oficial que no precisa cuántos están ligados al combate a la criminalidad.

El año pasado, se registraron 28.711 homicidios dolosos, la cifra anual más alta desde que se inició el registro en 1997.

Con regularidad se descubren fosas comunes que contienen docenas o incluso cientos de cuerpos no identificados. Casi 4.000 cadáveres de este tipo se han encontrado desde 2007, según la Comisión Nacional de Derechos Humanos.

Comentarios