La pandemia no impidió que el aniversario 39 de la gesta de Malvinas estuviera colmado de actos y conmemoraciones para recordar nuevamente que la lucha por la soberanía de las islas continúa y que los veteranos de cada centro de ex combatientes del país tienen cada vez más presente que sus acciones apuntan a la solidaridad con las problemáticas sociales y que la Causa Malvinas pertenece también, cada vez un poco más, a todo el pueblo argentino.
Con la activa participación de los veteranos pertenecientes al Centro de ex Combatientes de Rosario y de sus hijos, que hoy conforman la Generación Malvinas, algunos de los eventos más destacados de los que ocurrieron en estos días tuvieron como finalidad refrescar la memoria acerca de esos trágicos hechos ocurridos en el Atlántico Sur hace casi cuarenta años mediante la exhibición de películas, obras teatrales, actos en el Monumento a los caídos y hasta un homenaje a los veteranos y caídos en la plaza Soldado Desza donde el ex combatiente Julio Más señaló que formó parte de un grupo que “fue a una guerra a defender a la patria sin solicitar nada a cambio. Nos tocó cumplir con un servicio militar, pero más allá de eso fuimos a defender lo que nos habían enseñado en la escuela primaria: que las Malvinas eran argentinas. No fuimos con el uniforme de Videla, fuimos con el uniforme de San Martín a defender la bandera de Belgrano”.
Una película para “malvinizar”
El jueves 1° pudo verse en el anfiteatro municipal Humberto de Nito, la película documental Un encuentro con Malvinas, que luego tuvo otras funciones con carácter benéfico –podían donarse alimentos no perecederos a cambio de una entrada– el viernes y el sábado, a las 14, y tendrá otra hoy, en el mismo horario, en una sala del Complejo Monumental.
Además del estreno en el anfiteatro, el documental se exhibió por streaming en centros de excombatientes y de agrupaciones de hijos de soldados de Malvinas de todo el país. El documental de la realizadora María Fernanda Moreno se filmó íntegramente en Rosario y, según su directora, busca “sumarse a la causa de malvinizar e invita al espectador a preguntarse qué se hizo durante todos los años que pasaron desde la guerra”.
El film contó con la participación de Pablo Rago y de ex combatientes. Con un registro semificcional, Un encuentro con Malvinas se inicia con la historia de una niña de 10 años que debe escribir, como tarea escolar, una carta para enviarle a un veterano de la guerra de las Islas Malvinas. Su padre, a quien interpreta Rago, la ayuda con el trabajo y recuerda que durante el conflicto bélico en las islas del Atlántico Sur, en 1982, él también tenía 10 años.
“A partir de ahí se desarrolla toda la película: Pablo conoce el Centro de Ex Combatientes de Rosario y se encuentra con los testimonios más crudos de la guerra contados en primera persona”, contó la realizadora, y agregó: “No se puede ficcionar un veterano de guerra, nadie mejor que ellos para contar lo que sucedió”.
En ese sentido, en un abordaje austero y directo pero con cuidados encuadres, Moreno grabó la charla de los ex combatientes con Rago, donde se rememoran las cruentas vivencias durante un encuentro en la sede del Centro de Ex Combatientes de Rosario. Allí se devela, mediante los enfoques que cada uno de los veteranos va haciendo sobre ese tiempo, lo que significó la guerra en sí misma pero también, y esto resulta impactante en el film, lo terrible que resultó el regreso, donde buena parte de aquellos soldados no pudieron adaptarse y no tuvieron ningún tipo de contención.
“Todos coinciden en lo mismo: fue más duro volver que el combate en sí; ahí comienza el proceso de desmalvinización que lleva a que el número de suicidios sea hoy mayor al de caídos en combate”, señaló Moreno. En un momento de la historia de Encuentro con Malvinas, el protagonista se pregunta qué se sabía en aquél momento de lo que había pasado y qué saben los chicos ahora. El documental cumple sobradamente con sus objetivos de poner en evidencia esa desmemoria de una de las historias más trágicas del país y despierta la curiosidad para poder entender el suceso en su verdadera dimensión.
Teatro de sentimientos
Tras la proyección del film documental, en el mismo anfiteatro, hubo una función especial de Malvinas, canto al sentimiento de un pueblo, una obra teatral multipremiada que lleva la friolera de mil puestas desde su estreno en 1992 y que cuenta la historia de cómo tres jóvenes amigos desde la infancia son enviados a la guerra de Malvinas cuando cumplen sus 18 años. La puesta aborda el sufrimiento de estos jóvenes cuando todo en sus vidas, sueños, pasiones, amores se ven arrancados de cuajo. Una obra emotiva y con mucho énfasis en que significó un acto de desesperación de la última dictadura cívico-militar que no dudó para salvar su pellejo en enviar jóvenes inexpertos a combatir con una fuerza bélica manifiestamente superior. Tiene dirección de Néstor Zapata y música de Litto Nebbia.
Esa misma noche, a las 24, los ex combatientes y los jóvenes de Generación Malvinas cantaron el Himno Nacional frente al Monumento a los Caídos; a las 8 de la mañana del viernes, los concejales y el intendente izaron la bandera junto a veteranos y a las 18 tuvo lugar el acto principal organizado por los ex combatientes en el Monumento a los Caídos, actividades que tuvieron como finalidad la conmemoración del nuevo aniversario.
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