Paola Cándido
Una mujer denunció que le negaron el derecho a tomar agua en jarra de la canilla en una de las sucursales de Café Martínez, bar ubicado en la zona de Puerto Norte de la ciudad. Una ordenanza –que fue sancionada en 2015 y comenzó a implementarse desde hace dos años– establece que los locales gastronómicos de Rosario deben ofrecer agua a los clientes de forma libre y gratuita. Pero allí eso no sucedió. Es por eso que hoy se presentará en el Distrito Centro una denuncia ante el Tribunal de Faltas Municipal.
“La clienta que estaba consumiendo en el local gastronómico pidió agua de la canilla y se la negaron. Le ofrecieron agua envasada, en botella. Nadie se va a fundir por un vaso de agua”, dijo a El Ciudadano Aníbal Faccendini, docente de la Cátedra del Agua de la UNR, lugar desde el cual impulsó la propuesta.
Faccendini explicó que la ordenanza ya tuvo tiempo de adaptación y su campaña para que los rosarinos conozcan el derecho.
“El bar tuvo una actitud incivilizada y violenta con esta ciudadana que no pudo acceder al agua potable, libre y gratuita. A esta altura lo que debería ocurrir es que al sentarse un cliente el mozo sirva la jarra y los vasos, aunque consuman o no”, explicó.
El docente recordó que los dueños de bares y restaurantes que no cumplan con la normativa pueden ser multados y los locales clausurados: las sanciones arrancan desde los 2 mil pesos y, las clausuras, llegan hasta los 90 días.
“Si Rosario funciona como una ciudad amable la gente va a consumir más. El derecho a jarra es humano, social y popular. Tiene que respetarse. El 65 por ciento de los bares lo cumple, el resto se hacen los distraídos”, advirtió Faccendini.
Y concluyó: “Venimos bregando por esta iniciativa desde hace muchos años. Da vergüenza que pase esto en el siglo XXI”.
Dónde denunciar
La idea es que la población envíe su denuncia al correo electrónico catedradelagua@yahoo.com.ar o que envíe un mensaje vía Whatsaap al 155 523957 para hacer “valer el derecho”.
Los datos que se requieren para formalizar la denuncia son nombre y apellido del denunciante, lugar y hora en que sucedió, garantizar que hubo testigos de la negativa o retaceo, y un relato sobre cómo sucedió el hecho.
“Es importante tener testigos que acrediten que el hecho sucedió tal como lo denuncia la persona”, puntualizó el letrado docente de la UNR.
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