Autoridades sanitarias del Pami realizaron esta semana una clase didáctica sobre cómo limpiar los cacharros para eliminar la larva del mosquito que contagia de dengue y una charla sobre las medidas preventivas para evitar criaderos y la picadura del aedes aegypti. La actividad, dirigida hacia adultos mayores, tuvo lugar en un centro de jubilados en la localidad bonaerense de José León Suárez, tras detectarse un creciente número de contagios en el Gran Buenos Aires. Ahora la actividad de nacionalizará.
Con más de mil casos confirmados a nivel nacional, el Ministerio de Salud bonaerense dio cuenta de que el brote de dengue se expandió ya a 12 de los 135 municipios bonaerenses: La Matanza, Tres de Febrero, Quilmes, General San Martin, Lomas de Zamora, Vicente López, Lanús, Malvinas Argentinas, Avellaneda, La Plata, San Miguel y Merlo.
Frente a la expansión, la estrategia es involucrar de lleno a toda la población. “El descacharreo es una parte y sobre esta acción hay que resaltar que se deben limpiar los cacharros, juguetes o bebederos de perros o ponerles agua hirviendo antes de tirarlos, porque la larva solo muere si se superan los 40 grados o desciende de los 10, sino se reproduce”, remarcó Mónica Ibarra, jefa de Prevención Sociocomunitaria del Pami, a cargo de la charla, que es la segunda que se hace y que ahora se replicará en todo el país.
Ibarra, junto a Yanina Miragaya, coordinadora del equipo de Epidemiología y Riesgo Sanitario del Pami, encabezaron la actividad que abarcó también a Zika y Chikungunya –también contagiadas por picadura de mosquito– y la demostración de un correcto descacharreo a un grupo de 30 jubilados en el centro “Vivir para servir”.
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La exposición recorrió varios temas, desde qué es el dengue hasta cómo se comporta la larva y las formas de prevención y medidas a tomar en caso de contagio para reportar el caso en un hospital y que se active el protocolo.
“Las medidas de protección más eficaces contra estas enfermedades son las que evitan las picaduras de mosquitos y la identificación temprana y la asistencia clínica cuando ocurre la infección, pueden disminuir la carga de morbilidad y mortalidad, además del aislamiento del paciente virémico para limitar la dispersión de virus”, detalló la epidemióloga Miragaya.
Por su parte, Ibarra remarcó la importancia de mantener “el agua limpia en bebederos de perros y platos de macetas, además de colocar protección en las rejillas y evitar criaderos de mosquitos en agua estancada en juguetes, floreros, neumáticos y tarros o cualquier recipiente que esté en lugares húmedos y con sombra.
Por su parte, la epidemióloga Miragaya subrayó la importancia de “fortalecer y actualizar la información sobre el comportamiento del mosquito y las formas de prevenir la picadura y cuidados de los infectados, en personas mayores, que son población de riesgo”.
“La idea es que esta información se replique en afiliados, familias, niños y escuelas”, indicó la funcionaria, quien confirmó que realizarán la próxima charla el viernes en la localidad bonaerense de Quilmes.
Con una demostración de limpieza profunda de los recipientes antes de eliminarlos para que la larva muera y no se reproduzca, las especialistas remarcaron también la importancia de realizar la consulta clínica para notificar el caso y fortalecer la vigilancia epidemiológica.
Además, una vez notificado el infectado, se activa el protocolo del Ministerio de Salud provincial, que implica la fumigación en nueve cuadras alrededor de la zona, la verificación de la existencia de otros posibles casos y cuidar que la persona infectada no vuelva a ser picada.
El ministro salud de la Nación, Gines González García, reiteró este jueves su preocupación por la expansión del dengue: “Es la epidemia más grande de América del Sur”, advirtió.
Ante el incremento de los casos, la Organización Panamericana de la Salud y la Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS) reiteraron a los Estados miembro la necesidad de implementar acciones intersectoriales de preparación y respuesta a la epidemia
Según las cifras la Plataforma de Información en Salud de las Américas (Plisa) de la OPS, en Brasil se contabilizaron 399.388 casos sospechosos, de los cuales 134.552 fueron confirmados por laboratorio, con 242 casos graves y 88 muertes.Y en Paraguay había 88.777 casos notificados, 4.831 confirmados, con seis muertos.
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