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De un lado y otro hablan de negociar, pero nadie cede

La UCR retoma mañana el diálogo con el oficialismo sólo para que “acepte” el rechazo al DNU en el Senado.

 

Pampuro pide más diálogo a los suyos. Morales quiere hablar pero sin marcha atrás.
Pampuro pide más diálogo a los suyos. Morales quiere hablar pero sin marcha atrás.

¿Tiempo de negociar? El senador radical Gerardo Morales, una de las cabezas visibles de la arremetida opositora en el Congreso, aseguró que mañana continuará el diálogo con el oficialismo para intentar destrabar el conflicto por el uso de reservas para el pago de deuda pública. Pero al mismo tiempo, acotó la amplitud de la oferta al indicar que el diálogo sería para que el gobierno “acepte” la nueva distribución de poder en las Cámaras –que la Casa Rosada considera injusta y violatoria de la historia parlamentaria– y favorezca el tratamiento en el Senado del nuevo decreto de necesidad y urgencia que habilita el uso de los fondos del Banco Central “para derogarlo o rechazarlo”. Desde la otra trinchera, el diputado kirchnerista Agustín Rossi señaló que los bloques de su fuerza política “seguirán buscando situaciones de consenso” para arribar a acuerdos en torno al mismo tema y a su conexo: la aceptación como presidenta de la entidad monetaria de Mercedes Marcó del Pont, un blanco personificado de la revancha opositora. El santafesino, con todo, también ciñó los espacios de negociación al quejarse de los “palos en la rueda” contra las “medidas beneficiosas para todos los argentinos” que –a su entender– tomó la presidenta Cristina Fernández.

Quien también se refirió a la necesidad de bajar los decibeles del enfrentamiento a “todo o nada” fue el ministro del Interior, Florencio Randazzo. Al respecto, aclaró que “nadie (en el kirchnerismo) cree que ceder es perder”. Fue una alusión a los dichos del presidente provisional del Senado, José Pampuro, quien el sábado había asegurado que algunos de su sector tenían ese reparo sobre la conveniencia de flexibilizar posturas para salir de la nueva encerrona.

Pero igual que el resto de los interlocutores, Randazzo restringió la generosidad negociadora: “Lo que no podemos hacer es ceder en aquellas cuestiones estratégicas, no para el gobierno sino para el pueblo, como es honrar las deudas de Argentina”.

Respecto de esta hora de las “negociaciones”, el radical Morales anticipó que el objetivo de la entente opositora en el Senado es reunirse con las autoridades del bloque kirchnerista pero “para que acepten la nueva realidad política y se avengan a la composición de la nueva comisión” bicameral que tiene por objeto analizar los decretos de necesidad y urgencia, un instrumento incorporado por la reforma constitucional de 1994 pero que fueron utilizados sin control parlamentario hasta su reglamentación en 2006 por iniciativa del gobierno de Néstor Kirchner.

Morales confirmó que el viernes pasado se reunió con su par oficialista Pampuro –quien había reclamado “dialoguismo” a su tropa–, e indicó que la oposición pretende que “haya dictamen (de comisión revisora de los DNU) para llegar al recinto el jueves y así tratar la «derogación o el rechazo» del decreto de necesidad y urgencia que prevé uso de reservas”. Ya con esto el mensaje es que no hay marcha atrás en la embestida, pero por si no queda claro el radical agregó: “Por el discurso virulento de la presidenta no veo que pueda darse un mayor diálogo”.

Por su parte, el titular del bloque de diputados del Frente Para la Victoria, Rossi, sostuvo que la oposición “trata de debilitarlo (al gobierno) buscando cualquier argumento”. Tras ello, señaló que igual el kirchnerismo “seguirá buscando situaciones de consenso parlamentario”.

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