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Antes chetos

De tinchos y milipilis: etimología de las nuevas formas de señalar estereotipos de clase media-alta

Cuando el hijo de Valeria Mazza fue golpeado el fin de semana frente a un boliche de Pichincha, los jóvenes que lo atacaron utilizaron la palabra tincho a modo de burla. El término es una expresión despectiva para referirse a las personas de clase media-alta y alta en la sociedad de Argentina


Cuando el hijo de Valeria Mazza fue golpeado el fin de semana frente a un boliche de Pichincha, los jóvenes que lo atacaron utilizaron la palabra tincho a modo de burla.

Según especificó el abogado de la familia Gravier-Mazza, este “insulto” fue empleado segundos antes de que los agresores escucharan el acento de Tiziano al hablar.

La palabra tincho como tal no está oficializada como una burla, no aparece en el diccionario de la Real Academia Española, pero aun así los jóvenes argentinos la utilizan para burlas o agresiones verbales.

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El término es una expresión despectiva para referirse a las personas de clase media-alta y alta en la sociedad de Argentina. Los que anteriormente eran denominados chetos o conchetos ahora son tinchos. En cuanto a la elección del nombre tiene que ver con el apodo de Martín, que según el público usualmente las personas con este estilo de vida se llaman así.

Otro término muy utilizado es Milipili, que funciona como la contraparte de tincho. Se trata de una conjunción de los apodos de las chicas llamadas Milagros y Pilar, dos nombres que, al igual que Martín, son bastante utilizados en familias de alto poder adquisitivo en el país.

Estos jóvenes realizan deportes como el rugby y el hockey; visten con ropa de marca; utilizan el último smartphone de moda; residen en zona norte o en diferentes barrios exclusivos de CABA y demuestran su egocentrismo en las redes sociales.

Tiziano fue agredido en la madrugada del domingo en la puerta del boliche Forest. Según comentó el abogado de la familia, el joven se acercó al establecimiento bailable para esperar a unas amigas que se encontraban dentro cuando los agresores le dijeron “tincho”.

“Aparentemente lo han escuchado hablar, tal vez con un tono que no es frecuente para la ciudad de Rosario, y por ese solo hecho lo agredieron y le dieron esos dos golpes de puño que tuvieron esa terrible consecuencia”, expresó el letrado.

El joven sufrió fractura de desplazamiento de mandíbula y permaneció internado por 24 horas en el Hospital Británico. Luego, fue trasladado al Hospital Austral, donde será intervenido quirúrgicamente el miércoles 8.

En cuanto a la causa, quedó en manos del fiscal Pablo Lanza, el cual ordenó medidas investigativas a la Agencia de Investigación Criminal (AIC) para dar con los responsables, según la Fiscalía

Con información de Noticias Argentinas – Camila Olivera

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