Ciudad

¿Estamos acatando la cuarentena?

De película: Rosario tuvo un viernes inédito en el primer día de aislamiento

Las calles estuvieron semidesiertas y hubo poca circulación de ómnibus y taxis. Se vieron colas para comprar en los supermercados. Bien temprano algunos jubilados fueron a los bancos, pese a que estaban cerrados. En el Mercado de Concentración de Fisherton remarcaron mucho los precios


La cuarentena impuesta por el gobierno nacional para evitar la propagación del coronavirus se hizo notar desde la el primer minuto de este viernes. Las calles de la ciudad aparecieron semidesiertas, con escasa circulación de ómnibus del transporte urbano –y con pocos pasajeros– y taxis. Los comercios que abrieron fueron, en general, los permitidos. Y en ese marco pudieron verse en algunos supermercados (y también en granjas) largas colas para comprar mercadería. En tanto, además pudo advertirse (sobre todo bien temprano) cierto movimiento de jubilados que se acercaron hasta los bancos con el objetivo de cobrar sus haberes, aunque las entidades permanecían cerradas por las medidas oficiales.

Los taxis circularon, aunque para ellos la medida es optativa. También pudieron verse algunos vehículos particulares. Mientras que los ómnibus salieron con la frecuencia de los sábados. Y este sábado todo será igual.

Los supermercados, mercados y almacenes barriales estuvieron con sus puertas abiertas y el movimiento de las primeras horas fue un poco más tranquilo debido a las medidas del gobierno para que todos no se agolparan. Eso contrastó un poco con las frenéticas imágenes de los últimos días con el torbellino de compradores que buscaban abastecerse de productos para afrontar la cuarentena, aún sin confirmaciones sobre lo que sucedería. Igual, en varios locales hubo este viernes largas colas en la vereda para comprar.

Los quioscos de diarios funcionaron con normalidad. Así lo hizo saber Carlos Martínez, secretario General del Sindicato de Vendedores de Diarios y Revistas de Rosario. “El gobierno lo declaró como actividad esencial. La información debe estar, por supuesto tomando todos los recaudos. Solicitamos al público que se lo pida a su canillita para que evite llegarse al quiosco”, señaló en declaraciones radiales.

Las zonas de parques, como el de España, Urquiza, o el mismo bulevar Oroño, habitualmente pobladas por personas que realizan actividades al aire libre, también se mostraron desiertas, entregando así una postal inédita para un día otoñal de verano.

El control

La cuarentena blindada obligatoria regirá hasta el martes 31 de marzo. Tanto el presidente Alberto Fernández como el gobernador Omar Perotti, aseguraron que “se actuará con la mayor severidad” para hacer cumplir el aislamiento preventivo contra el coronavirus. Y en Rosario, ya desde temprano, la Policía vigiló las calles.

Por caso, en bulevar Oroño y 27 de Febrero detenían vehículo por vehículo. Con barbijos y guantes pedían el DNI, los papeles del auto y preguntaban por qué circulaban a pesar de la cuarentena obligatoria. También estuvieron apostados en otros puntos de la ciudad.

Justamente, la franja del parque costero de Puerto Norte (y la zona más céntrica) lució desierta. Pero la excepción fue un patrullero parapetado a efectos de dispersar a los escasos pescadores ocultos en la barranca. En otro operativo en Brown al 2800 se llevaron a dos jóvenes cartoneros, que seguían revisando los contenedores para ganarse el mango a pesar de la cuarentena.

 

El mercado

Por su parte, el Mercado de Concentración de Fisherton fue escenario de un gran flujo vehicular y malestar de clientes que fueron a comprar mercadería al por mayor. Según indicaron quienes hacen reparto de frutas y verduras, hubo un exponencial e inexplicable aumento de precios del jueves al viernes.

Allí también hubo largas colas de vehículos que entraban y salían del predio de Wilde y Mendoza, donde una gran cantidad de personas fue a comprar mercadería antes del fin de semana largo.

“Aumentó todo. La bolsa de papas estaba a 200 pesos y ahora está a 500”, apuntó uno de los compradores a Canal 3, mientras que otro explicó que los ocho kilos de lechuga estaban este jueves a 300 pesos y ahora están a 500.

“Se fue todo a las nubes, la fruta también. ¿Sabés lo que va a ser la semana que viene?”, añadió un verdulero. Otro comprador contó que demoró dos horas para poder adquirir mercadería.

“Hay que comprar porque el lunes es feriado y hasta el martes no llega mercadería. Aumentó todo un 30 por ciento de lo que valía ayer. Hay que seguir batallando”, lamentó.

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