Nikolay Davidenko, que parece haber empezado el curso de la misma manera que acabó el año 2009, hecho todo un coloso.
Tal y como pudo comprobar el suizo Roger Federer, que se vio superado de principio a fin por el ganador del último Masters, como confirman las diez bolas de ruptura que tuvo que afrontar el de Basilea a lo largo del encuentro.
Una presión constante que permitió a Davidenko, número seis mundial, romper hasta en dos ocasiones el servicio de Federer en la primera manga, y una en el segundo y definitivo parcial.
Así sumó su segundo triunfo ante el número uno, que igual domina cómodamente el historial por 12-2.
En la final, el ruso se medirá con el español Rafael Nadal, quien en primer turno batió al serbio Víctor Troicki por 6-1 y 6-3 en 68 minutos de juego.
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