El Ciudadano
De acuerdo al informe correspondiente al primer trimestre en la provincia, la actividad industrial refleja las pésimas condiciones que ofrece la macroeconomía. El centro y norte de Santa Fe registró una caída del 8,3% interanual, y extendió a cuatro trimestres consecutivos la actual etapa de crisis fabril. Desde la Union Industrial de Santa Fe (Uisf) apuntan a “menores niveles de consumo, paralización de proyectos de inversión, ajustes en las tarifas y altos costos financieros”. Las expectativas a futuro no son las mejores y de hecho hablan de meses “mayormente desfavorables”.
La caída en la utilización de la capacidad instalada es un reflejo de la crisis que acusan desde el sector. El primer trimestre de este año alcanzó el 59,4%, visiblemente por debajo del 63,2% registrado en igual período del 2018. De acuerdo al informe “el 51% de las empresas industriales no anticipa cambios en la utilización de la capacidad instalada durante el período marzo-mayo de 2019, mientras que el 42% prevé una reducción”.
Las micro, pequeñas y medianas empresas industriales “presentan un constante deterioro” incluso a partir del año 2017, indica el documento. En diciembre de 2018 se registraron 280 empresas menos en relación al nivel verificado el mismo mes del año anterior. A esa misma altura del año, esa cantidad de cierres significó 3211 puestos de trabajo registrado menos, también en comparación con el mismo período.
Las industrias santafesinas señalaron a la energía eléctrica como el componente con mayor incremento en su estructura de costos. El precio mayorista de ese insumo exhibió en el primer trimestre de 2019 un incremento del 32% interanual. Según indicaron, el costo total por unidad de producción registró en el primer trimestre una aceleración que llegó hasta el 53,6%, pero que no pudieron trasladar a precios “por la severa declinación de los niveles de consumo”.
Poca financiación
En materia de financiamiento los números también son negativos. Según el Banco Central, los préstamos en moneda nacional al sector privado disminuyeron 23,5% interanual. Por otra parte el saldo de crédito a las empresas cayó 15% en términos reales.
El informe de la Uisf indica que el nivel de tasas de interés “coarta las posibilidades de desarrollo de la producción y limita la demanda de bienes”. En el primer trimestre de 2019, las tasas de interés por préstamos a Pymes se ubicaron por encima de 50% y hasta 60%.
Conforme a esta realidad, la porción más grande del sector industrial, califica como “no adecuado” o “bajo” el nivel de pedidos para producción. Precisamente el 63% de las empresas lo considera de esa manera, mientras que un 23% de ellas evalúa “satisfactoriamente” la demanda recibida de pedidos.
Baja continua en todos los rubros
El caso de la producción de biodiesel evidencia una clara caída, por un lado en la producción y por otro lado en la capacidad exportadora de la provincia. El declive correspondiente al primer punto es del 77% interanual en el primer bimestre, mientras que las exportaciones en el primer trimestre sufrieron un retroceso del 79% interanual.
Por su parte la producción en la industria láctea sufrió una caída interanual del 11,7%. En ese sector otra de las particularidades la marcó el retroceso en las ventas. La comercialización de leche fluída sufrió un desplome del 11%, en polvo el 10%, y quesos un 6%, todas mediciones interanuales hasta el primer bimestre de 2019.
En el orden nacional la actividad frigorífica en el segmento bovino presentó en el primer trimestre de 2019 presentó también una caída del 5,2% interanual.
Por último, la utilización de la capacidad instalada en la “Industria Metalmecánica” enfrentó en el primer bimestre de 2019 nuevos retrocesos, fenómeno que se observa a partir de mayo de 2018. En enero la capacidad utilizada en la industria metalmecánica fue de 38,4%, mientras que en febrero se ubicó en 42%. Los niveles alcanzados en el primer bimestre se posicionan entre los más reducidos desde comienzos de siglo, solo superados en el año 2002
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