En el Sanatorio de la Mujer se ha presentado una serie de temáticas que tienen que ver con el cuidado de la salud de las embarazadas y los beneficios de los estudios realizados durante la gestación. “Es de público conocimiento que el estudio ecográfico en el embarazo con el correr de los años se ha ido popularizando y hoy es prácticamente impensado que una mujer embarazada no pueda acceder a un estudio sencillo, económico y de alto valor diagnóstico como es la ecografía”, destacó Andrés Quaranta, jefe del Servicio de Diagnóstico por Imágenes del centro asistencial.
Sin embargo, el doctor mencionó que a pesar de la accesibilidad del estudio y del alcance social que ha tenido, “es necesario exponer cuáles son sus alcances para que las madres sepan por qué deben realizarse una ecografía”.
Mario Hugo Marchetti, especialista en obstetricia y en diagnóstico prenatal en ecografías, tiene a su cargo la coordinación del servicio de ecografías del sanatorio y ante la consulta, respondió: “Sin dudas la ultrasonografía es el método por excelencia para el diagnóstico prenatal y tiene que ir acompañado con el entrenamiento adecuado del profesional que realiza el estudio y la calidad del equipamiento”.
Según advirtió Marchetti, el sanatorio cuenta con seis equipos de ecografías de alta gama y de última generación que complementan la función del equipo de resonancia magnética de alto campo con accesorios y software especialmente diseñados para el estudio de la mujer. “Este equipamiento permite un examen fetal rápido y detallado en casos específicos en que la ecografía plantee alguna duda diagnóstica. Además de la embarazada, el resonador cuenta con bobina y software dedicado patología mamaria permitiendo un análisis complementario a los ecográficos y mamográficos”, detalló.
“Se ha avanzado mucho en materia del diagnóstico prenatal por medio del ultrasonido. No sólo es importante para evaluar biometría fetal (medida de cabeza, abdomen y fémur) como se hacía en un primer momento, sino que también a medida que fue transcurriendo el tiempo comenzó a importar la morfología (anatomía detallada) del feto. Esto nos llevó a mejorar el diagnóstico de múltiples malformaciones, lo que nos ayuda a evaluar y seguir la patología diagnosticada”, explicó Marchetti, y agregó: “Insisto, para esto ha tenido un papel preponderante el avance de la tecnología y la capacitación profesional”.
Por otro lado, una de las “perlas” de la gestación ha sido la ecografía 4D, uno de los recursos más avanzados de la tecnología preparto que se conoce, sobre todo, por un método para “calmar la ansiedad” de los futuros padres y conocer así algunos rasgos de su bebé. Sin embargo, este estudio es mucho más que una video en vivo y en directo, casi “cara a cara” con el feto.
“La ecografía 4D es muy joven tiene apenas seis años y aún sigue desarrollándose. Las utilizamos desde que se incorporó esta tecnología al país y pienso que es un complemento muy importante de la ecografía convencional y tiene un significado relevante para la embarazada, al tener la posibilidad de conocer a su hijo antes de su nacimiento”. Asimismo, ahondó que “con esta técnica se explora toda la superficie del feto, pudiendo de esta forma mostrar a los padres en tiempo y forma real la anatomía del bebé”.
Ante un embarazo, el doctor reconoce que se presentan muchas dudas, miedos, y el no conocer qué está pasando con esa nueva vida puede aumentar el grado de ansiedad de la madre. De todas formas, este tipo de estudios proporciona la calma requerida al saber “que todo marcha bien”. “Entiendo que la pregunta de ‘si todo está bien con el embarazo’ tiene una amplia respuesta, pero voy a tratar de ser lo mas didáctico posible: hoy se controlan por ultrasonido los distintos circuitos sanguíneos materno-fetal por medio de la técnica de ‘doppler color’, que es una herramienta invalorable para evaluar la salud del feto en el vientre materno, valorando el flujo de sangre que le llega al feto tanto a nivel abdominal como cerebral”.
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