Ciudad

Cualquier ayuda vale a la hora de conseguir trabajo

Por: Agustín Aranda. El Servicio Municipal de Empleo ofrece múltiples alternativas para acercar oferta y demanda laboral.

El Servicio Municipal de Empleo recibe por mes entre 400 y 500 rosarinos en busca de orientación vocacional, asesoramiento y vinculación con empresas de la ciudad. El rango etáreo que más acude al servicio municipal es el grupo de mayores de 25 años. Entre los perfiles más postulados se encuentran construcción, administrativos, profesionales –psicólogos y abogados en su mayoría– y vendedores. En 2010, la repartición asistió a más de 300 empresas rosarinas en emplear a 180 personas y más de 1.400 ciudadanos realizaron cursos de formación profesional. En busca de mayor visibilidad, el servicio, en coordinación con los programas del Ministerio de Trabajo de la Nación, ofrece la consultoría, selección, orientación y capacitación laboral de forma gratuita. “No es sólo el trabajo que ayudamos a encontrar sino todo el asesoramiento, el camino hace el postulante. Es un servicio de consultoría permanente”, graficó Gabriela Estrella, directora de la repartición.

La relación fluctuante entre demanda y oferta laboral no está liberada a “la mano invisible del mercado”, concepto acuñado por el padre de la economía liberal, Adam Smith. Esta es la intención del Servicio Municipal del Empleo. Según las estadísticas, en 2010 el área de intermediación laboral contactó a 305 empresas rosarinas, de las cuales 63 solicitaron personal. De un total de 205 puestos pedidos y 950 personas preseleccionadas para entrevistas de trabajo, 180 desempleados fueron contratados. Los puestos más demandados corresponden a operarios y técnicos, vendedores, atención al cliente y personal de seguridad.

En 2010, más de 1.400 personas realizaron cursos de formación profesional a través de convenios con el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social de la Nación, y cursos financiados con Presupuesto Participativo municipal. Para el 2011, que cuenta con 40 cursos ya iniciados a través de fondos del PP, hay más de mil inscriptos.

Historia del servicio

El Servicio Municipal del Empleo nació en 1995 como parte de la Secretaría de Producción local. En 2001, durante la profunda crisis económica y social en toda la Argentina, la repartición pasó a la Secretaría de Promoción Social y comenzó a atender a la problemática de desempleo mediante la administración de los distintos planes de asistencia. “Allí se perdió un poco el objetivo que tiene cualquier servicio de empleo en el mundo, que es capacitar y conectar el mercado laboral con la población”, recordó Estrella. A partir de 2006, comenzó a organizar programas de mejoramiento de condiciones de empleabilidad y se integró a la red de empleo del Ministerio de Trabajo de la Nación para culminar trabajando también con la repartición provincial. Desde 2008 se realizó una reestructuración –modificación de los equipos de trabajo anteriormente abocados a tareas de “emergencia” por los planes sociales– y posicionamiento del  área. Así se montaron tres áreas. La primera, orientación laboral, atiende la primera consulta, hace una entrevista de trabajo y evalúa el perfil ocupacional. “Es necesario, cuando las personas enviaron el currículo, conocerlas para ver las postulaciones laborales y, en caso de necesario y dependiendo de la demanda del mercado laboral, se puede reorientar, capacitación mediante”, explicó la directora.

La segunda, capacitación y formación profesional, se encarga de mejorar la empleabilidad de las personas con cursos y talleres de oficios vinculados a la demanda de las empresas. “Al estar vinculados con las cámaras empresarias y sindicatos se propone una calificación o recalificación de las personas no sólo para mejorar la empleabilidad de los desocupados sino también aquellos subocupados o que desean apuntar otro puesto”, detalló Estrella. En el primer semestre del 2011 comenzaron una serie de capacitaciones a cargo de las universidades de la ciudad, públicas o privadas.

La tercera área, de intermediación laboral, corresponde a la vinculación entre la oferta y la demanda del mercado del trabajo. Allí se cruza la base de datos del Ministerio de Trabajo de la Nación con las empresas. “Con profesionales altamente calificados, entre ellos, un grupo de psicólogos, seleccionamos mediante entrevistas los puestos de trabajo que solicitan las empresas”, precisó Estrella.

Comentarios