La presidenta Cristina Fernández de Kirchner enumeró ayer los avances logrados por su gobierno en materia productiva, de aumento de las exportaciones y de crecimiento del mercado interno, y dijo que sueña “con que algún día no tengamos que tener asignación (universal por hijo), porque todos tienen trabajo registrado”. “Sueño con que el derecho a jubilación no sea por un reconocimiento del Estado, sino producto del aporte de años de trabajo registrado. Quiero que cada trabajador pueda tener ese beneficio y ese derecho”, planteó la jefa de Estado.
La mandataria inauguró ayer en la localidad cordobesa de Morteros la séptima Muestra Internacional de Lechería y el Centro Genético “Presidente Néstor Kirchner”, donde explicó que “el consumo per cápita se ubicó en 205 litros de leche por habitante por año, que es el mismo nivel de los países desarrollados”.
No obstante, dijo que “hay que seguir adelante” e insistió en que “en vez de confrontar debemos unir nuestras capacidades”, en línea con los llamados a la unidad nacional que viene realizando en los últimos meses.
Como suele ser habitual en los actos oficiales, Cristina brindó precisiones sobre el tema que la convoca. Así, dijo que la Argentina aumentó su producción de leche “en un 30 por ciento en estos últimos años, del 2003 a la fecha”; señaló que la exportación de leche se incrementó “en un 260 por ciento y el consumo per cápita se ubicó en 205 litros de leche por habitante por año”.
También destacó que el Producto Bruto Interno (PBI) del país es hoy “el doble que el que existía en 2003”, antes de que asuma la presidencia Néstor Kirchner. “Nos hemos dado cuenta los argentinos que mercado interno y exportación no son antinomia”, enfatizó. “Si uno ve la apertura de la economía, que es la suma de las exportaciones y las importaciones, en 2003 era del 17 por ciento y hoy representan el doble, es decir, el 34. Y tenemos un PBI que también es el doble que el del 2003”, enumeró.
La presidenta llegó ayer al predio de la Sociedad Rural de Morteros, en el departamento San Justo, situado a 210 kilómetros al noreste de la capital de Córdoba, acompañada por la ministra de Industria, Débora Giorgi; el ministro de Agricultura Julián Domínguez; el secretario General Oscar Parrilli; el gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti; el gobernador electo de esa provincia, José Manuel de la Sota; el intendente Germán Pratto y representantes del mundo ganadero, lechero y de la industrial nacional.
Tras la andanada de números, Cristina Fernández dio paso en su discurso al contenido político de su proyecto de gobierno, del que resaltó que “no es para unos pocos, sino para los 40 millones de argentinos”.
Recordó que el ex presidente Néstor Kirchner “fue uno de los que más aportó” para impulsar ese modelo, y debido a ese enorme esfuerzo físico “tal vez por eso hoy no está con nosotros”.
De sus palabras de desprendió que la presidenta no cree que esté todo hecho. Pidió “agregarle mayor valor” a la producción agropecuaria porque “somos el tercer productor de leche mundial pero vamos por más. Hay que seguir creciendo”.
“Tenemos que lograr producir quesos de pasta dura, que valen 6 mil dólares; y si los rallamos y lo metemos en una bolsita, valen 8 mil dólares la tonelada; y si logramos una marca gourmet, valen 12 mil dólares”, ejemplificó la mandataria ante un auditorio de tamberos y productores lácteos.
“Gracias a esta producción hemos doblado el Producto Bruto Interno que teníamos el año pasado y vivimos el proceso de desarrollo económico más importante en la historia de la Argentina”, puntualizó, para advertir: “No podemos detenerlo, hay que seguir adelante. En vez de confrontar debemos unir nuestras capacidades”.
Fue allí que explicitó sus deseos para el futuro. “Yo sueño con que algún día no tengamos que tener asignación, porque todos tengan trabajo registrado; sueño con que el derecho a jubilación no sea por un reconocimiento del Estado, sino producto del aporte de años de trabajo registrado. Quiero que cada trabajador pueda tener ese beneficio y ese derecho”, planteó la jefa de Estado.
Además, prometió “analizar la propuesta del centro de estudios de genética” en Morteros, que solicitó el presidente de la Sociedad Rural de esa ciudad, cuando agradeció en su discurso las gestiones de Néstor Kirchner para la producción lechera.
En ese sentido, Cristina Fernández agregó: “Hemos dado un salto exponencial en la República Argentina en materia animal y vegetal que debemos aprovechar. Buscamos industrializar la ruralidad”.
Al respecto, reiteró su deseo de “que los chicos de los pueblos vuelvan a sus pueblos, no que se tengan que ir. Tenemos que trabajar en todos los pueblos rurales de nuestro país para que los chicos capacitados tengan salida laboral, posibilidad de crecimiento, esperanza de futuro; que es lo que nos habían arrebatado y robado a los argentinos: la utopía del futuro”.
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