Ezequiel Nieva
La visita del ministro de Seguridad Maximiliano Pullaro a la Cámara de Diputados no conformó a nadie: ni a los representantes de la oposición, que lo habían citado para pedirle explicaciones sobre el aumento de la violencia, los homicidios y la falta de resultados en materia de prevención, ni al propio Pullaro, que aprovechó la reunión para reclamar la sanción de nuevas leyes vinculadas al funcionamiento de la Policía y al combate contra el delito.
La reunión fue a puertas cerradas y duró algo más de dos horas. Junto a Pullaro estuvieron miembros de su equipo, pero también los ministros de Gobierno Pablo Farías y de Justicia Ricardo Silberstein, que no habían sido convocados por la Legislatura pero fueron igual. La principal conclusión vertida por Pullaro durante su exposición es que la seguridad es competencia de los tres poderes del Estado y, por lo tanto, “se tiene que resolver entre los tres poderes”. En ese sentido, el ministro hizo fuertes críticas a las decisiones de la Justicia y lanzó una serie de reclamos dirigidos a jueces y fiscales.
“Algo está fallando si a un delincuente que hiere a una persona se lo imputa por lesiones leves y no por tentativa de homicidio”, señaló el ministro en declaraciones a la prensa luego de la entrevista con los diputados. La referencia apuntó a los últimos y resonantes hechos delictivos registrados en Rosario y a la saga de homicidios que enlutó a la ciudad de Santa Fe.
Según el funcionario provincial, “son pocos (los delincuentes) los que van presos pese a los hechos que cometen. Una persona que hiere a otra de un balazo en una pierna, si se recupera antes de los 30 días el agresor, es imputada por lesiones leves. Es una locura”, se quejó Pullaro en clara alusión al funcionamiento del sistema judicial.
Durante la reunión con los diputados, Pullaro reclamó la sanción de nuevas leyes para combatir la inseguridad. Luego, en diálogo con la prensa, el ministro evitó entrar en precisiones, aunque señaló que “el sistema debe mejorar de manera conjunta” y agregó que “la seguridad es fundamental y no se puede sacar ventaja política de esta crisis que estamos pasando”.
“Hay que discutir en serio la cuestión de la seguridad, yo le pongo todo, intento que la Policía funcione mejor, si hay un policía que comete un delito, lo apartamos; formamos a la Policía, la capacitamos, le ponemos mucho esfuerzo”, continuó el ministro.
Consultado por el asalto con persecución incluida ocurrido el martes por la tarde en Rosario, Pullaro calificó al hecho como “tremendo” y dijo que “ese delincuente que quedó detenido, entre el 2009 y 2018 cometió nueve delitos; de esos delitos, cinco fueron graves: robo calificado con uso de armas. No seguí estudiando el caso para no calentarme. Son hechos que te rebelan, por la cantidad de veces que una persona es detenida por la fuerza de seguridad y esté poco tiempo presa en función de los delitos que comete”.
Fue allí cuando pidió “cambiar legislaciones de fondo”, sin entrar en detalles sobre las leyes que habría que modificar. “Debemos modificar algunas normas determinadas y quienes conducimos las fuerzas de seguridad tenemos que mejorar para que los fiscales tengan todas las herramientas”.
Disconformes
La oposición no quedó conforme con las explicaciones del ministro. El diputado del PJ Leandro Busatto, uno de los impulsores de la convocatoria, sostuvo que la exposición lo dejó “insatisfecho” y afirmó que el Frente Progresista le deja al próximo gobierno “una pesada herencia en materia de seguridad”.
“Lo que vemos sobre la seguridad es que hay una puesta en escena de hacer aparecer a la gestión como ocupada en los temas que hay que resolver”, cuestionó Busatto. “Pero no nos quedó claro qué herramientas el gobierno ha usado para afrontar esta crisis extraordinaria. La presencia del ministro era para hablar sobre eso, no sobre su gestión o sobre cuántos patrulleros compró”.
“Quedamos insatisfechos, convocamos al ministro y esto se hace a puertas cerradas, sin la presencia del periodismo, sin participación de otros sectores de la sociedad civil. Hay que sacarse la careta; para discutir estas cosas hay que convocar a gente que está fuera de la Legislatura, del Ejecutivo, del Poder Judicial. Se necesita valor para abordar esta problemática escuchando más a los que están afuera que a los que están adentro”, agregó Busatto.
En respuesta a los reclamos que hizo Pullaro sobre las leyes pendientes, el legislador del PJ recordó que “la mayoría en la Legislatura la tiene el Frente Progresista”, pese a lo cual no fueron sancionadas. Y agregó que “las leyes que el ministro tuvo como herramientas fueron propuestas de la oposición: el Organismo de Investigación Judicial fue un proyecto de (Eduardo) Toniolli, la de Emergencia en Seguridad de (Armando) Traferri y la de Protección de Testigos y Fondos de Recompensa es de mi autoría”.
Ante la prensa, Busatto comentó uno de los momentos más tensos de la reunión: “Le pregunté (a Pullaro) si era una situación excepcional lo que pasaba en Santa Fe y su respuesta fue leer estadísticas de homicidios de 2003 a 2007 y de ahí saltó a 2017, para decirme que la tasa de homicidios era igual. Cuando le pregunté por 2014 y 2016, me reconoció que habían sido los dos años más violentos en la historia de la ciudad de Santa Fe, uno durante la gestión de (Raúl) Lamberto y el otro durante la suya. Si no ponemos toda la verdad sobre la mesa, es muy difícil trabajar”.
Por su parte, el diputado del Frente Social y Popular Carlos Del Frade señaló ante los medios santafesinos: “Nos vamos con respuestas no concretas. Queríamos saber qué pasa con el narcotráfico y el contrabando de armas y no tuvimos nombres concretos, hubo poca información concreta. Tuvimos muy pocas respuestas al por qué suceden las cosas, no se habló de narcotráfico y tampoco de contrabando de armas”.
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