Brian Nahuel Leiva llegó al Hospital Roque Sáenz Peña con una herida de bala pasadas las 5 de este lunes. Llegó en un Volkswagen Gol trend, que presentaba seis impactos de bala y quedó incautado para peritajes. Poco después, los médicos del centro de salud público lo declararon muerto. Tenía 18 años.
Los primeros testimonios permitieron determinar que el muchacho fue baleado en el mismo auto en el que lo llevaron, y que el ataque unos metros hacia el sur del local bailable Complejo Sureño, de avenida Arijón al 2035, en la esquina de pasaje Suárez. En rigor, en las redes sociales el boliche se promociona desde comienzos de junio como Fire, el mismo nombre de un local de Oroño al 4700 que fue allanado y clausurado en diciembre pasado.
Los primeros datos ubican a Leiva subiendo a su auto Volkswagen Gol Trend gris–en el que lo llevaron al Sáenz Peña– cuando le dispararon desde otro vehículo. “Escuché los tiros, miré el despertador y eran las 5.15”, precisó un vecino. Voceros de la investigación detallaron que el muchacho recibió al menos tres impactos de bala: en la cabeza, estómago y pecho, y que murió prácticamente en el acto. Leiva vivía en inmediaciones de Avellaneda y Garibaldi, confió un detective.
Un móvil de la seccional 21ª –ubicada a tres cuadras del lugar del hecho– y otro del Gabinete de Criminalística de la Policía de Investigaciones (PDI) llegaron hasta al boliche, por orden de la fiscal de Homicidios Dolosos en turno, Georgina Pairola.
Los peritos secuestraron nueve vainas servidas, calibre 9 milímetros.
Por la mañana, los vecinos consultados por El Ciudadano dijeron sólo haber escuchado detonaciones minutos después de las 5 de la mañana, sin brindar más detalles. “Eran como ruidos de chapas”, comentó una mujer que tiene un local en el centro comercial de Las Delicias. Por la lluvia, la avenida Arijón lucía casi desierta. Otro comerciante arriesgó que los tiradores abrieron fuego con armas automáticas. Ninguna de las personas entrevistadas dijo tener problemas con la actividad nocturna de El Sureño. Al contrario: “Le da movimiento al barrio”, se escuchó.
En el local se anunciaba, para la noche del domingo, víspera de feriado, un espectáculo en vivo del cantante de cumbia Tito y la Liga con disc jockeys, bajo el nombre de Fire.
Un boliche de nombre Fire fue allanado el 9 de diciembre pasado. Al local, que estaba en Oroño al 4700, llegó personal de la Tropa de Operaciones Especiales, Policía de Investigaciones y agentes municipales. Según voceros relacionados a esa investigación, el lugar superaba ampliamente la capacidad de concurrencia. Pero también hubo otros motivos para el allanamiento: para la Fiscalía de Gravedad Institucional al local iban personas vinculadas con el hampa local que en ese momento eran investigadas por la saga de balaceras a sedes del Poder Judicial. Además, en la cocina de la discoteca, las fuerzas de seguridad secuestraron una pistola 9 milímetros.
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