A casi un año de los homicidios del sindicado narcoempresario Luis Roberto Medina y su novia Justina Pérez Castelli, la causa judicial, todavía sin imputados, avanza con nuevas medidas. La Fiscalía 9ª, a cargo de Cristina Herrera, y el Juzgado de Instrucción 5ª, comandado por Alejandra Rodenas, trabajan en el caso no sólo con la Policía local sino también con una fiscalía porteña y su policía judicial. Hasta dicha sede viajó, el pasado viernes, una comitiva judicial para trasladar material de interés para la causa que se peritará en la capital nacional con tecnología de punta, dijeron fuentes tribunalicias.
Luis Medina tenía 42 años y desde hacía dos estaba radicado en Buenos Aires. Los últimos días de diciembre de 2013 volvió a Rosario junto con su novia Justina, con quien convivía en un country de Pilar. Ambos fueron asesinados en la mañana del pasado 29 de diciembre cuando se trasladaban en un vehículo que Medina le había regalado a la joven, por el acceso sur. A la altura de Ayolas, el vehículo fue interceptado por otro y el Gringo Medina recibió al menos ocho disparos mientras que la chica fue atravesada por una bala a la altura del abdomen que también la llevó a la muerte.
La Fiscalía maneja una hipótesis del doble crimen que mantiene en absoluto hermetismo y sobre ella encamina su teoría del caso. A su vez, la Tropa de Operaciones Especiales, que colabora en la investigación, maneja al menos otras tres posibilidades que pudieron haber dado lugar a los homicidios aunque no se descartan puntos de conexión con la visión fiscal. Todo se investiga, refirió una fuente judicial consultada.
Por su parte, la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) de San Isidro está colaborando con la investigación provincial a través de su policía judicial. Es que tanto en Capital como en el Gran Buenos Aires existe tecnología que permite acceder a otro tipo de elemento probatorio, explicó al mismo portavoz del caso. Por este motivo el viernes pasado viajó personal de la Fiscalía y el juzgado instructor para llevar material que fue secuestrado durante la pesquisa inicial, que incluye 5 teléfonos celulares, con el fin de realizar peritajes sobre intercambio de comunicaciones, ubicación de celdas activadas y escuchas telefónicas, entre otros ítems.
A su vez se conoció que la Fiscalía Federal Nº 1 de Rosario, a cargo de Marcelo Degiovanni, solicitó a la Justicia provincial un nuevo peritaje sobre la Mac Ultrabook de Medina, incautada durante un cuestionado procedimiento en el hotel del casino. En ella interviene la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), que intentará desencriptar archivos. La información que arroje esta práctica será compartida por ambos fueros, describió una fuente judicial. A la vez, el juzgado continúa con la toma de testimoniales y trabaja en la reconstrucción de los últimos días de la víctimas.
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