La Cumbre Climática que se está desarrollando en Copenhague está produciendo sus primeros frutos. Los países se muestran dispuestos a colaborar, y de la forma en que hay que hacerlo.
La Unión Europea ayudará con unos 2.400 millones de euros al año a los países pobres. Todos los Estados miembros, además de la Comisión Europea, aportarán dinero para el fondo con el que la que la ONU quiere adaptarse a la ‘transición verde’, con lo que entre 2010 y 2012, la UE contribuirá con 7.200 millones de euros a la causa. Hasta los países que están bajo la protección financiera del Fondo Monetario Internacional ayudarán con pequeñas sumas.
Nicolas Sarkozy y Gordon Brown anunciaron esta mañana incluso que recortarán sus emisiones en 2020 un 30% respecto a los niveles de 1990, aunque la legislación europea sólo obliga ahora al 20%. La UE aún no se ha comprometido colectivamente a esta cifra, que anunciará probablemente la semana próxima si EEUU da algún paso más.
Fredrik Reinfeldt, el primer ministro sueco recalcó que la Administración Obama ni siquiera pretende considerar 1990 como referencia. EEUU propone una reducción del 17% en relación a 2005, lo que en respecto al 90 apenas significa un 4 ó 5%. “Tenemos que ver movimiento de los demás”, insistió Reinfeldt.
La Administración Obama está poco contenta con las cifras propuestas por los europeos, en particular los 100.000 millones de euros que, según la UE, se requieren en ayudas a medio plazo para los países en desarrollo. Según confió el presidente de EEUU a los líderes europeos hace unas semanas, esa cifra será “muy difícil” de aprobar en el Congreso de Washington. Pero los europeos insisten en sus números, que consideran deben convertirse en un Tratado en el primer semestre de 2010.
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