“La reforma laboral apunta a debilitar al trabajador y a la teoría del derrame. Eso es un cuento chino, que no funcionó en ninguna parte del mundo. El gobierno no debería repetir lo que hizo con el ajuste previsional. Sería prudente, para pacificar el país, que convoque a un diálogo amplio y no apelar a sancionar la ley en forma express”, así se expresó el diputado nacional y ex ministro de la Producción de la provincia, Luis Contigiani, luego de una reunión que mantuvo este viernes en la sede de la CGT Rosario con representantes obreros de la región.
Previo al inicio del encuentro, se realizó un minuto de silencio en homenaje a los dos aceiteros fallecidos en el accidente en la cerealera Cofco, en Puerto general San Martín. Junto al diputado en las declaraciones a la prensa estuvieron Sergio Alladio, secretario general del Sindicato de Camioneros de Santa Fe y Antonio Donello, referente de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM).
Sobre la reforma laboral en diputado nacional insistió: “Es crítica, no la comparto”.
“Ya me expresado públicamente: aún con los borradores más moderados a los que tuve acceso en estos meses, parece que está inspirada bajo viejos preceptos, que no dieron resultado en el mundo, de la teoría del derrame, lo que es darle poder al capital y especialmente a los capitales concentrados y financieros con la pretensión de que dándoles más poder rentabilidad, baja de impuestos, flexibilizando derechos laborales, estos capitales van a invertir en bien de la sociedad. Desgraciadamente es un cuento chino. Todas esas ventajas extraordinarias terminaron en los países fiscales del mundo y en la timba financiera”, señaló el legislador nacional.
En defensa de la familia y el trabajo
Asimismo, Contigiani consideró: “Debemos defender el trabajo. Alrededor del trabajo gira la vida, la salud, el ocio, la vida familiar, la educación, el proyecto de vida de nuestros hijos y con eso no hay que meterse”.
“Creo que con este contexto económico nacional en donde la economía tiene serios problemas, por un lado por el tema de la demanda del mercado interno, por el lado de las importaciones y de muchas pymes industriales, plantear una reforma laboral en este escenario no tiene otro argumento que tratar de darle más poder al capital, desigualar el poder de negociación entre el trabajo y el capital y por eso es que no comparto en líneas generales”, remarcó.
El ex ministro de la Producción recordó también el proceso por el que atravesó el país gobernado por Michel Temer: “Esto se remonta a lo que inició Brasil hace pocos meses atrás. ¿Cómo partió de la reforma laboral? Planteó una reforma laboral que nos llevó al medioevo: con doce horas de trabajo ininterrumpido, negociaciones entre empresas y gremios por afuera de la ley o de los convenios colectivos, reducción a 30 minutos el almuerzo del trabajador, fraccionamiento en tres o cuatro partes de las vacaciones, entre otras cosas. Así partió la nueva oleada de reforma laboral, porque la otra fue en los 90”.
Por último, Contigiani sostuvo: “Mi recomendación al gobierno (nacional), en pos del bien común que luego de lo que pasó tristemente con la reforma jubilatoria, es que pise la pelota, no vaya en febrero del año que viene a redoblar la apuesta con la reforma laboral porque va a generar más tensiones sociales. Los convocamos todos a un diálogo democrático y social, a discutir en serio estos temas más de fondo: cómo crecemos en Argentina, cómo nos desarrollamos, cómo despejamos algunas dudas y no sacar esto de prepo”.
