El índice de pobreza se ubicó en el 40,6% (11,7 millones de ciudadanos en los 31 aglomerados urbanos, 18 millones de personas en la población total) en el primer semestre del año, 3 décimas de punto por debajo del 40,9% respecto al mismo período de 2020, informó este jueves el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). En Rosario la cifra fue del 39,4%, reflejando una leve mejora respecto al 41,8% del primer trimestre del año pasado.
En tanto el nivel de indigencia expuso un leve aumento y se ubicó en 10,7% (3 millones de personas, 4,8 millones del total del país) en el segundo semestre, frente al 10,5% de igual período del año pasado.
La cifra correspondiente a los 31 aglomerados urbanos se ubicó 1,4 puntos porcentuales por debajo del 42% que registró Argentina en la última medición, la correspondiente al segundo semestre del año pasado.
#DatoINDEC
La pobreza alcanzó al 40,6% de las personas y al 31,2% de los hogares en el 1° semestre de 2021; la indigencia, al 10,7% y al 8,2%, respectivamente https://t.co/y0VRlL7grB pic.twitter.com/8XFb46u8PK— INDEC Argentina (@INDECArgentina) September 30, 2021
Al poner la lupa sobre el Gran Rosario, los datos oficiales relevaron niveles de pobreza por debajo del promedio nacional.
Allí la cifra no es extrapolable sino directa: en la región hay un 39,4% de pobreza, lo que equivale a 522.922 personas y un 10,6% de indigencia, que representa 140.774 ciudadanos y ciudadanas. Ambos datos mostraron mejoras respecto al 41,8% de pobreza y 13,3% de indigencia correspondiente al mismo período de 2020.
Por otra parte, el instituto informó que en el primer semestre 2021, la pobreza fue de 54,3% entre menores de 15 años; de 48,5% en personas de 15 a 29; de 36,3% en las de 30 a 64; y de 13,8% en mayores de 65.
El informe detalló que la región con mayor incidencia de la pobreza en el primer semestre 2021 fue el Noreste (45,4%), y la de menor, la Patagonia (34,4%).
Según el Indec, los ingresos en el primer semestre del año “aumentaron más que las canastas” de alimentos y servicios que fijan el umbral de la Línea de Indigencia y de Pobreza, “lo que explica la reducción de la tasa de pobreza del conjunto de la población en el promedio del semestre”.
La incidencia de la pobreza y la indigencia resultan de la capacidad de los hogares de acceder a la canasta básica alimentaria (CBA) y a la canasta básica total (CBT) mediante ingresos monetarios.
En promedio, “el ingreso total familiar aumentó un 32,4%. Las canastas regionales promedio aumentaron 28,4% (la Alimentaria) y 25,5% (CBT), explicó el Indec.
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